La periodista especializada en género Luciana Peker visitó por primera vez la Feria del Libro de Junín para presentar su último trabajo «La revolución de las hijas», a sala llena, y dar lugar al debate sobre las conquistas y las luchas que tiene que continuar dando el movimiento feminista.
Recordó el femicidio de Maira Bénitez, no calificado así por la justicia, quien había desaparecido en Villa Ángela, Chaco, el 16 de diciembre de 2016 y cuyo cuerpo fue hallado este jueves.
«Este año hubo una sentencia, pero no dijo femicidio y el cuerpo de Maira nunca había aparecido. Apareció ayer (jueves) y se conoció hoy (viernes) la noticia. Antonia su madre) estaba destrozada. Me hace acordar a las víctimas de las violaciones a los derechos humanos en la dictadura, porque para padres y madres, aunque supieran que sus hijos estaban muertos, ese encuentro con el cuerpo sigue siendo terrible», expresó.
El caso de Maira Mendoza está íntimamente relacionado con su Revolución de las hijas. De hecho, forma parte del capítulo de «las hijas no encontradas». Destacó que la reciente aparición de su cuerpo, aunque sea una noticia tan triste, es parte de una conquista del movimiento de mujeres ya que «muchas otras mujeres que no fueron encontradas, a lo mejor sí lo hubieran sido si se seguían buscando».
La causa de Maira Benítez fue un femicidio Lo pedimos en Chaco este año. Y ahora es urgente que se cumpla la Ley Brisa, para Brisa, la hija de Maira y para que su abuela Antonia pueda criarla. La justicia y el Estado no pueden mirar para otro lado. https://t.co/xTWM9MJQ1Z
— Luciana Peker (@lucianapeker) September 6, 2019
Entonces, puso el foco en la justicia machista y en una deuda del Estado a la hora de hacerse responsable por esto. Explicó que al no existir la caratula de femicidio en la sentencia que arrojó el caso de Maira Benítez, priva a su hija Brisa de acceder a la ley que lleva su mismo nombre y que «implica una reparación económica, más o menos similar a una jubilación mínima, para que las niñas y niños, hijas e hijos de las víctimas de femicidio no dejen de tener esa protección económica que hubieran tenido con su mamá».
Señaló que, en este caso, Brisa no puede cobrar a través de su abuela Antonia, porque la sentencia de Maira no es de femicidio. «Si el Estado sabe que hay una justicia machista, no le puede quitar un derecho normado. Porque Brisa no tiene la culpa ni de que hayan asesinado a su mamá, ni de que la justicia sea machista. El Estado tiene que darle igual esa reparación económica».
Por Juani Portiglia – @JIPortiglia
