El Comisario General (R) Marcelo Loyola, que como recordamos fuera distinguido oportunamente por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio (AIPS) se refirió a esta temática en relación a los recientes hechos de suicidios de adolescentes en Colegios de nuestra Provincia.
El suicidio ocupa un lugar entre las primeras 10 causas de muerte en las estadísticas de la Organización Mundial de la Salud. Se considera que cada día se suicidan en el mundo al menos 1. 100 personas y lo intentan cientos de miles, independientemente de la geografía.
«Es un proceso multicausal, donde no podemos dejar de tener en cuenta situaciones que pueden ser conducentes, como Bulling, adicciones, violencia familiar y de género, personas con determinadas enfermedades», afirmó Loyola.
«Así, desde el seno familiar, amigos, establecimientos educativos debemos contribuir a refinar la sensibilidad para detectar señales de peligro y factores de riesgo suicida, y familiarizarlos con el proceso de remisión a autoridades sanitarias o grupos de autoayuda comunitarios. Por ejemplo, si un niño escolar o adolescente dice: «Yo me quiero matar» o «yo me voy a suicidar», o «yo no quiero vivir», son señales de peligro, por lo que adultos u otros niños y jóvenes deben tomarlo muy en serio y abordarlo con profesionales médicos a los fines de evaluar la situación», agregó.
«La prevalencia de la conducta suicida entre los jóvenes es alta, por lo que todas las escuelas deberían estar preparadas para su prevención, si tenemos en cuenta que como institución, tiene la función de desarrollar ciudadanos maduros y productivos (incluye desarrollar salud psicológica)», aseguró Loyola.
«Utilizando estas herramientas, y entre todos podemos colaborar para prevenir el flagelo del suicidio», comentó el juninense, quien fuera parte de la cúpula de la Policía de la Provincia de Buenos Aires y Director de Seguridad de la ciudad de Chivilcoy.