Este sábado, en la Ciudad Deportiva y desde las cinco de la tarde, Sarmiento jugará el primero de los ocho partidos que le quedan a la fase regular de la Primera B, previo a definir qué equipos clasificarán a la Zona Campeonato y cuáles deberán aferrarse a mantener la categoría en la Zona Permanencia.
En diálogo con Junín 24, Marianela Costa reconoció que al equipo se le hizo larga la espera y que esperan el compromiso con mucha ansiedad, pero también convencidas del gran trabajo que se realizó durante la pretemporada y potenciadas desde el aspecto físico.
«Esta última semana la arrancamos con un amistoso el lunes, que fue movido, y después pasadas típicas de pretemporada. A partir del miércoles ya empezamos a agarrar la pelota. En lo personal, físicamente me siento mucho mejor. Creo que el equipo llega bien, con ganas de arrancar de nuevo con todo esto. Hace un tiempo que estamos paradas y estamos ansiosas por volver a jugar», remarcó quien fue una de las jugadoras más importantes que tuvieron Las Maestras en el semestre en que hicieron su estreno en una competición AFA.
El rival de turno será el Deportivo Armenio, que se encuentra en la decimosexta posición con 12 puntos; precisamente 12 unidades menos de las que cosechó Sarmiento, que arranca este 2020 en la sexta posición de la Primera B. Respecto a esta compromiso, la linqueña analizó: «Sabemos que puede ser un equipo inferior a nosotras, lo que no quiere decir que no vayamos a tomar el partido con seriedad. Como equipo, vamos a tener un par de cambios en el esquema, en el armado. Ahora que se está recuperando Meli (Garialdi), que fue una baja importante, nos va a permitir hacer algunas modificaciones al equipo. Yo veo que estamos bien».
Dentro de esas modificaciones podría tener lugar su regreso a la mitad de la cancha, su posición natural. Aunque la buena de Mari Costa no quiso adelantar detalles de la formación y avisó que quien quiera enterarse deberá asistir esta sábado a la Ciudad Deportiva, porque el apoyo vale mucho para las pibas.
Analizó, además, qué virtudes del semestre que pasó debe mantener e incluso potenciar el equipo, así como los aspectos a los que hay que prestar mayor atención a la hora de mejorar: «Lo que me gustó fue la manera en la que afrontamos el torneo. Era todo nuevo para nosotras. Estábamos ansiosas y asustadas a la vez. Pero Sarmiento se lo tomó con mucho compromiso y estuvimos a la altura de todo, por ser el primer año que jugamos. Hubo garra, compromiso, ganas de superarse todo el tiempo. Lo que tenemos que mejorar es la concentración, esa falta de maduración que por ahí nos llevaba a cometer pequeños errores que pagábamos con goles en contra».
Y como a Mari Costa no hay detalle que se le escape a la hora de hablar de fútbol, repitió el mismo análisis, pero ahora a título personal: «Me tocó jugar en muchas posiciones. Arranqué en mi puesto natural, en la mitad de la cancha y creo que estuve bien. Después, cuando me tocó jugar de delantera, y porque soy muy exigente conmigo, por ahí me trabé cuando las cosas no salieron. A mí me gusta agarrar la pelota, me exijo mucho. De todos modos, yo voy a jugar donde el equipo necesite», remarcó.
Tan claros tienen los objetivos Las Maestras que, mientras puedan cumpliros, a la linqueña la preocupa poco en qué lugar las muestre la tabla de posiciones siempre que les permita acceder a la tan ansiada Zona Campeonato: «Una vez que terminen estas ocho fechas que quedan, mientras estemos adentro de las diez va a estar genial. Después vamos a poder incorporar los refuerzos que tenemos y eso nos va a potenciar como equipo. Así que mientras entremos en la Zona Campeonato, que sea en el puesto que sea», avisó.
Una vez allí, y aunque entiende que los demás equipos también van a haber reforzado sus planteles, confía en que el equipo va a tener el potencial para darle batalla a cualquiera, invitando a soñar con lo que ya sabemos que sueñan pero por cabuleros no queremos ni nombrar.
«Acá cualquier equipo te hace partido. Creo que es incluso más competitivo que la primera de AFA, porque existe esa paridad entre los equipos. Como equipo necesitábamos mover el medio, sumar volantes por afuera, porque no tenemos tanto recambio. Llegaron Lourdes y Belén que nos van a venir muy bien. Y la garra de Pini no se negocia con nada», concluyó.
Por Juani Portiglia