La mujer fue condenada a 25 años de cárcel tras confesar el asesinato. Dijo que se cansó de que su esposo la maltratara.
Una mujer de Carolina del Sur, en Estados Unidos, fue condenada a 25 años de prisión tras admitir que mató a su esposo poniéndole gotas para los ojos en el agua que tomaba. Cuando fue detenida en 2018, los medios hablaron de un crimen «casi perfecto» y los investigadores sostuvieron que se trataba del asesinato «más raro del mundo».
Lana Sue Clayton, una enfermera de 53 años, se declaró culpable de homicidio involuntario por la muerte de Steven Clayton, de 64 años, reportó la cadena WBTV. A modo de defensa, la mujer afirmó que lo hizo para vengarse de los abusos de su esposo, que la había «golpeado, pateado y ahorcado con sus manos», pero que no quería matarlo.
También dijo que fue abusada sexualmente por un tío cuando era niña y que fue violada en una base militar cuando trabajaba por el Ejército, lo que le causó estrés postraumático.
Inicialmente se creyó que el hombre murió de causas naturales, pero una autopsia reveló altos niveles de tetrahidrozolina, una sustancia que se encuentra en las gotas para los ojos y puede ser tóxica cuando ingerida en dosis suficientemente grandes.
Lana Sue luego confesó que le puso las gotas en su agua en reiteradas ocasiones entre el 19 y el 21 de julio de 2018 para que «estuviera enfermo e incómodo». «Estaba enojada por sus abusos y solo quería que me dejara tranquila», dijo Clayton. «Nunca pensé que lo mataría», agregó.
La mujer dijo que se le ocurrió usar gotas para los ojos, que son inoloras, incoloras e insípidas porque lo había visto en películas.
Los fiscales apuntaron no obstante que la mujer le había disparado a su esposo en 2016 con una ballesta, según reportó WSOC-TV. Entonces el caso fue considerado un accidente. A la luz del envenenamiento, creen que mató a su esposo por dinero, lanzó su teléfono a un lago para que éste no pudiera pedir ayuda y quemó luego su testamento.
«De los muchos casos de homicidio que traté, probablemente este gana como el más raro hasta ahora», dijo el juez Paul Burch.
En diciembre de 2019, un hombre de Carolina del Norte también fue acusado de matar a su esposa usando gotas para los ojos, reportó WSOC.