La cadena de electrodomésticos Musimundo, con una veintena de sucursales en el interior bonaerense, cerró en los últimos días otras tres de sus sucursales, esta vez en Trenque Lauquen, Saladillo y Mercedes, las que se suman a las otras que bajaron sus persianas la semana pasada en Bragado, Chivilcoy y Pehuajó.
En muchos casos, los trabajadores se enteraron del cierre cuando fueron a cumplir su día laboral y encontraron con carteles pegados en los vidrios que anunciaban el cierre de la sucursal.
En Trenque Lauquen, el comercio cerró tras poco más de un año de su apertura y dejó a siete empleados sin trabajo, quienes fueron notificados por el personal de seguridad cuando intentaron ingresar al local.
Las inquietudes principales de los clientes giraron en torno a dónde realizar los pagos de las cuotas de los productos adquiridos. Mientras que hicieron su compra vía internet y debían retirar el producto en la sucursal local recibieron un mail donde se les informó que el mismo será entregado en sus domicilios.
En el caso de Bragado, donde quedaron sin trabajo siete empleados, el intendente Vicente Gatica dijo que el cierre de franquicias es una política comercial que ha tenido la empresa en todo el país. Frente a ello, indicó que la Municipalidad se ha puesto en comunicación con los despedidos e intentará «contenerlos», aunque aclaró que «el Estado no está para tener más empleados».
También en Chivilcoy, donde los cuatro despedidos recibieron las indemnizaciones, la caída de las ventas y el aumento de las tarifas son dos de los puntos que llevaron al cierre de la sucursal, de acuerdo a los trascendidos.
