Su propietario César “Chari” Dárdano explicó a Junin24 los motivos que lo llevaron a tomar la decisión de cerrar, teniendo en cuenta que el mismo se encuentra en inmediaciones de las calles Rivadavia y Libertad, a larga distancia del corte producto de la obra detenida del paso bajo nivel de Av. Rivadavia.
Paso bajo nivel: “Ni un comercio más fundido”, reza el cartel del local “Ropa para todos” que acaba de bajar la persiana
Comenzó haciendo historia sobre el comercio al recordar que “nosotros estábamos frente al FONAVI. Durante ocho años. Pero se nos dio la oportunidad de un local más céntrico, ubicado al lado de una ferretería que trabajaba mucho. Y ni lo dudamos. Nos trasladamos. Fue en el mes de enero del 2023”.
Y si bien “en el primer local trabajamos bien, fue mucho mejor, diría que como nunca antes” y después iba a llegar el corte. Aunque lo teníamos en mente, pensábamos que como estábamos lejos no nos afectaría”.
Error. “La gente no dobla y es un desierto total. De hecho, hay muchos locales que no trabajan nada, otros están vacíos. El daño que ocasionó el corte afecta a Rivadavia, de punta a punta”.
La preocupación para Dárdano no termina en el cierre del local. “Tengo otro en Belgrano y Javier Muñiz, que está agonizando. Espero que no tengamos que cerrarlo porque es el sustento de la familia”, remarcó.
Por otra parte, el comerciante enfatizó que mientras la situación es la referida, “Comercio e Industria mira para otro lado y por eso puse “Ni un comercio más fundido”.
La presidente, “Mucciolo, se ofendió conmigo. Fue quien aceptó que el intendente dijera, en la última reunión, con cuatro comerciantes menos Chari. Y eso que soy socio”.
Pero “no se puede estar de los dos lados del mostrador. Ella está en Gas Junín y no puede alzar mucho la voz. No tiene cómo hacerlo porque el intendente es casi su jefe”.
Mientras tanto “seguimos en la obra de la desidia. Nadie sabe nada. Qué es lo que van a hacer, cuándo van a terminarla. No se sabe nada. Oficial tampoco hay nada” agregó Dárdano para terminar remarcando que “cuando el intendente decía que viajaba dos veces por semana a hablar con las autoridades nacionales, yo escribí la carta documento y nos contestaron que esto no era prioridad”.
Mientras tanto, “ellos cobran sus sueldos religiosamente, con nuestros impuestos que, encima ahora debo un año y medio de tasas y tengo que asumir un plan de pago porque ellos consideran a quién le corresponde y a quién no”.