El director general de Bromatología y Zoonosis del Gobierno de Junín, Julio Ferrero, llamó a los comerciantes, transportistas y vecinos a respetar la cadena de frío en lácteos, carnes, productos que contengan huevo y otros alimentos que necesiten mantener cadena de frío.
El director general de Bromatología y Zoonosis del Gobierno de Junín, Julio Ferrero, llamó a los vecinos a respetar la cadena de frío de los alimentos perecederos y tomar ciertas medidas de precaución antes de consumirlos.
De esta manera, el Ejecutivo busca evitar las Enfermedades Transmitidas por Alimentos (ETA), tales como gastroenteritis bacterianas, SUH, Salmonellosis etc.
También se deberán almacenar en refrigerador lo más pronto posible los alimentos cocinados y los perecederos. Los alimentos para niños deben preferentemente ser consumidos inmediatamente.
No descongelar a temperatura ambiente, sino en la parte baja de la nevera.
«La cadena de frío nace a partir de que el alimento se procesa, es decir, desde que se faena el cerdo, el pollo o la vaca, se cosecha la verdura o se recogen los huevos, y debe mantenerse durante todo el ciclo hasta el momento en que se consume», afirmó Ferrero.
«El consumidor es el último eslabón de la cadena de frío y tal vez el más importante, por eso es fundamental que actúe con responsabilidad», agregó y recomendó prestar especial atención en caso de que se produzcan cortes de energía.
«Los consumidores deben estar atentos a las características organolépticas de los alimentos, que son el color, el sabor, el olor y la textura propia de los mismos. Deben rechazarse todos aquellos que presenten o denoten pérdida de estas características. Además, cuando hay cortes de luz, averiguar si el comercio o supermercado en el que hacen las compras tiene o no grupo electrógeno. Hay que tener en cuenta que, cuatro o cinco horas después que dejan de funcionar, las heladeras pierden la temperatura optima», informó Ferrero.
Otra de las recomendaciones al momento de ir al supermercado es adquirir los productos refrigerados sobre el final del recorrido, para evitar que dichos alimentos permanezcan mucho tiempo fuera de las heladeras y freezers.
«Todo alimento está compuesto por materia orgánica, es decir que está constituido por proteínas, hidratos de carbono y lipidos. Todo eso forma parte de la alimentación del ser humano, pero también de las bacterias, que permanentemente están trabajando dentro de la carne, los huevos, los lácteos y otros productos. Las bacterias se multiplican constantemente y, si la humedad y la temperatura no son las adecuadas, pueden llegar a 280 billones», explicó el funcionario.
«A medida que evolucionan, las bacterias van colonizando los alimentos y es ahí donde pueden producir toxinas que a su vez producen enfermedades», agregó y detalló que la multiplicación de las bacterias es mayor a partir de los 5°C y hasta los 60°C.
A la hora de descongelar es necesario tener en cuenta algunas recomendaciones. Lo más seguro (aunque lleve más tiempo) es descongelar sacando los alimentos del freezer y colocándolos en la heladera. Otra opción segura es hacerlo con el microondas.
«Por eso es tan importante que la cadena de frío se mantenga en todo momento», finalizó.