Productores rurales de la zona de Saforcada afectadas por los robos

Herramientas, animales – ovejas, lechones, terneros- y hasta las ocho ruedas de una batea a la que dejaron sostenida con tacos.

Llegan a repetirse ilícitos en un mismo campo, con escasa diferencia de tiempo entre uno y otro.

El propietario del rodado –un chango para traslado de gas oil- que se encontraba estacionado en un predio ubicado detrás de la aceitera estima que perdió cuatro millones de pesos a partir del ilícito que se presume, se habría cometido durante el fin de semana.

Al igual que las 8 vacas que desaparecieron de un campo aledaño al autódromo Eusebio Marcilla, también en las últimas horas y descubierto ayer.

La pregunta que trasladan los productores es qué hacen desde el Comando Patrulla Rural e inclusive la justicia, porque no hay resultados. No recuperan sus pertenencias ni tampoco hay personas aprehendidas involucradas en los ilícitos.

El sector que estaría siendo el más afectado es el ubicado entre Junín y Saforcada.

Alguna de las víctimas explica que en menos de un mes fueron víctimas en cinco oportunidades, a pesar de contar hasta con cámaras de seguridad, lo que significa una pérdida económica importante. “Hay imágenes del momento en el que se llevan ovejas, por ejemplo y en oportunidades, cortan los sistemas de filmación para evitar ser identificados”.

Otra de las características que llevan a pensar en la impunidad con la que se manejan los delincuentes es que para trasladar objetos o animales necesitan desde camionetas hasta algún camión. “Ocho vacas no se esfuman”.