El Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (Suteba) denunció, a través de las redes sociales, que el Gobierno provincial recortaría 1.400 horas en la carga total de un alumno que estudia en escuelas técnicas si lleva adelante la reforma que planea para este sector.
La Dirección General de Cultura y Educación avanzará el año que viene con una serie de reformas en las 262 escuelas técnicas bonaerenses. El eje principal de las modificaciones está vinculado a la estructura curricular. Las autoridades entienden que el sistema actual disocia la teoría de la práctica y «está obsoleto», por lo que toma fuerza la idea de trabajar por áreas.
Ante este panorama, los sindicatos se encuentran en alerta. Tal es así, que en los últimos días el Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB) denunció que la dirección de Educación Técnico Profesional «pretende que directivos, docentes e inspectores completen una encuesta por internet sin debate ni discusión para justificar el ‘recorte de horas’, como una forma de legitimar el a juste en Educación».
Ahora, Suteba hizo circular un banner por las redes sociales en el que asegura que un alumno que transita por una escuela técnica pasará de tener 8.604 horas de clase a tener 7.128 con un recorte de 1.476 horas. El achicamiento, en los siete años de cursada, sería de 324 horas en el ciclo básico y de 1.152 en el superior.
«Desde que tomamos conocimiento de este proyecto a fines de junio, estamos convocando en los distritos a compañeros de escuelas técnicas para discutir sobre estos anuncios que no son más que otro ajuste, ahora en educación técnica», afirmó Gustavo Lappano, subsecretario de Educación Técnica y Agraria de Suteba.
Según le explicó a DIB a principios de mes la directora provincial de Educación Técnico Profesional, Lucía Galarreta Bolia, la reforma tiene el objetivo de «mejorar las materias que tiene la educación técnica». «El formato actual es secundaria más talleres, lo cual hace que sea un sistema disociado: los chicos cursan una parte del día de una manera y otra parte de otra. Es un modelo que está obsoleto», aseguró la funcionaria bonaerense.
Consultada por esta agencia sobre la carga horaria, Galarreta Bolia señaló que «va a ser la que tenga que ser en función de los objetivos que nos queremos plantear» y advirtió que «nuestro diseño curricular está altamente sobrepasado de la mínima impuesta a nivel nacional». Asimismo, aseguró que las modificaciones no están cerradas y que se escuchará a los sindicatos.
Sin embargo, Lappano señaló que se trata de una «modificación inconsulta» y que el Gobierno «pretendió que los docentes y directivos contestasen los días 16 y 17 de julio una ‘encuesta’ por internet sobre cuáles serían los cambios que deberían realizarse, mientras que el viernes 13 de julio ingresaron al Consejo General de Educación el proyecto de reforma, lo que demuestra que no hay diálogo»
Además, el sindicalista consideró que «la reducción de la carga horaria significa la pérdida de puestos de trabajo», pero que también podría poner «en riesgo la homologación de los títulos por parte del Instituto Nacional de Educación Tecnológica (Inet), lo que significa que los títulos técnicos de provincia podrían perder la validez nacional».