Este martes, en la Secretaría de la Sociedad Rural de Junín, se reunió la comisión directiva de la Sociedad Rural de Junín y se mostraron indignados, preocupados y disgustados por las medidas adoptadas recientemente por el Gobierno Nacional.
Sus miembros enfatizan que el campo siempre es el sector más perjudicado; en el caso particular del trigo, los productores agropecuarios sembraron con determinadas condiciones -lo que determinó una siembra récord de 6.100.000 hectáreas- y a mitad de camino fueron modificadas estas condiciones preestablecidas.
Desde el seno de la entidad ruralista local se preguntaron “¿si el cambio, no era justamente respetar las condiciones pautadas?” y afirmaron que “parece que se le hace difícil a los políticos cumplir con la palabra empeñada, algo que es moneda corriente en el sector”.
Más adelante sostuvieron que las retenciones empobrecen al interior; desalientan la producción, el empleo y el comercio. Puntualmente -agregaron- en la ciudad de Junín, con las nuevas medidas, va a haber 350 millones de pesos menos para gastar que afectará a todos los sectores de la comunidad.
Mencionaron más adelante que el sector ya viene aportando el 25 % de retenciones a la soja, más -enfatizaron- todos los impuestos que paga cualquier persona que se desarrolla en la actividad privada.
Destacaron también que “el esfuerzo ya lo viene haciendo el campo desde hace rato” y se preguntaron si “¿hacía falta semejante destrato?”
Duros con el mensaje oficial -a diferencia de lo sucedido en la inauguración de la ExpoJunín edición 2018-, la dirigencia local cuestiona “que fuimos beneficiados con la devaluación, en vez de hablar con la verdad y decir que lo hicieron porque tienen que cumplir con la baja del déficit”.
Finalmente, desde la entidad -que agrupa a un sector que fue clave en el triunfo de Cambiemos tanto a nivel local como provincial y nacional dado que es una de las fuertes bases electorales que tuvo hasta el momento la alianza gobernante- se les hizo un pedido a las entidades madres, a los fines que convoquen a una asamblea nacional para definir medidas gremiales a tomar, frente al perjuicio que se les está provocando a las 300.000 pymes que dinamizan el interior productivo.