Salía a trabajar y le robaron la Corven 110 azul y blanca

Los delincuentes sin dudas salen “a la pesca”. Son oportunistas que caminan por las calles buscando elementos para sustraer.

Lo sucedido la noche de ayer en calle Irlanda entre Pringles y Paso,  es un claro ejemplo.

Una mujer, a las 23:30, dispuesta para salir a trabajar, saca de su domicilio la moto, una Corven. La deja por un instante en la vereda, sin la llave colocada, para reingresar a buscar algo que había olvidado. Vuelve a la calle y la moto había desaparecido.

La moto, de 110 c.c. de cilindrada,  blanca y azul, que como señas particulares,  no tenía la patente colocada y lleva  un enganche –negro y cuadrado-en la rueda trasera  que su propietaria utilizaba para agregar un carrito.

Para la víctima no sólo es la impotencia por lo sucedido. Es su único medio de transporte, adquirido con mucho esfuerzo y fundamental para trasladarse.

Para el delincuente, un oportunista al que poco le importa el origen, sólo el destino que le dará. Que bien puede ser intentar venderla, desarmarla para comercializar las partes, agregarlas a algún otro rodado robado o continuar delinquiendo.

Hasta absurdo parece pensar en que tal vez medite, y la deje abandonada en alguna parte que le permita a su propietaria recuperarla.

Si alguien puede aportar información o datos concretos, puede comunicarse llamando al 2364-351547.