Nota de opinión del Concejal Santiago Aguiar
«Desde el Ejecutivo municipal vemos muchas veces que se pone en tela de juicio la celeridad con la que se le da tratamiento legislativo a los proyectos ingresados en las comisiones del Honorable Concejo Deliberante. Por ello, más allá de revalorizar la independencia de los poderes democráticos, sería interesante hacernos la pregunta de cómo funciona a la inversa, es decir que tanta importancia y celeridad otorga el Ejecutivo a los pedidos de informe del HCD.
Sin intentar generalizar, solo voy a referirme a mi experiencia durante estos primeros diez meses de gestión. En ese tiempo he presentado, entre otros proyectos, más de diez pedidos de informe de los cuales solo dos han sido respondidos por las Secretarías pertinentes.
Para dar algunos ejemplos concretos y sin detallar todos ellos, cinco meses ya cumplió sin respuesta alguna el pedido de informes referidos al cumplimiento de la Ley Provincial 12.573 de Grandes Superficies Comerciales para la instalación de Coppel, ya a punto de abrir sus puertas. Casi tres meses tiene el pedido de información respecto a la auditoría externa contratada con la Universidad de Buenos Aires por Decreto 519/16 del DE y por el cual al 30 de septiembre se lleva pagada una cifra cercana a los $600.000 con recursos del tesoro municipal.
De la misma manera puedo citar otros pedidos de informe sin respuesta, como el impacto que tendría el revalúo fiscal de la provincia (Decreto 790/16) en la tasa de CVP, la publicación del organigrama municipal (ni más ni menos que intentar saber quienes son los responsables de las distintas áreas de gestión), la supuesta puesta en marcha nuevamente de la Agencia de Desarrollo Local (pedido presentado tres meses antes discutir la constitución del Consejo Económico y Social), información de los avances en materia ambiental y los trabajos en el Relleno Sanitario Junín, entre otros.
De todas maneras y lejos de constituir “palos en la rueda” el HCD acompañó hasta el momento todos los proyectos que necesitó el Ejecutivo en estos diez meses, desde la consolidación de deuda con Ashira, siguiendo por la autorización de endeudamiento por $25 millones con el BAPRO y la autorización del convenio con provincia para recibir $35 millones para agua y cloaca y el programa habitacional Solidaridad con Municipios, solo para citar algunos ejemplos.
El Poder Legislativo local es la representación más cercana al conjunto de los intereses de los vecinos de Junín. Muy distinto de ser un obstáculo para la gestión, es el contrapeso natural del Ejecutivo en el que el voto popular ha depositado su confianza y en ello una enorme responsabilidad».
