La dirección de Prevención y Asistencia en Violencia Familiar del Gobierno de Junín, a cargo de Yanina Pichelli, llevó adelante una capacitación sobre el abordaje de los varones en los casos de violencia familiar.
La jornada estuvo a cargo Roberto Battaglia, psicólogo de la subsecretaría de Género y Diversidad Sexual de la provincia, quien destacó el crecimiento del número de denuncias y la importancia del abordaje integral de la problemática.
«Este encuentro nos parece importantísimo, porque nos brindó conocimientos sobre el abordaje y la nueva dinámica que se va a tomar a partir de ahora en la dirección. Es importante también el encuentro de otras instituciones, para que conozcan la forma de trabajo que vamos a tomar», afirmó Pichelli.
«Es fundamental tomar conocimiento sobre el abordaje de los varones y que, entre todos, podamos buscar la mejor alternativa para brindar atención a esta problemática que afecta a todos», agregó.
Por su parte, Battaglia manifestó: «Desde la subsecretaría de Género y Diversidad Sexual de la provincia, que es de donde venimos a dar esta charla, pensamos el abordaje del hombre que ejerce violencia de género como parte del abordaje integral. Es necesario que existan dispositivos para poder trabajar con una parte de la población de hombres que sean permeables a abordar para prevenir nuevos episodios de violencia, ya sea que ese hombre continúe con la mujer con la que está en pareja o que lo llegó a denunciar, o sea que el hombre pueda formar nuevas parejas».
«Sabemos que la conducta se aprende y se repite y que los episodios se van a volver a repetir, entonces abordar al hombre es una forma más de prevenir y proteger a las mujeres y a los chicos que quedan en el medio de todos los casos de violencia», agregó.
«Ha habido un ‘boom’ de denuncias en los juzgados, en las fiscalías y en las comisarías, que tiene que ver con una mayor visibilización de las violencias y con la menor tolerancia a todos los tipos de violencia. Esto ha generado que se comiencen a conformar nuevos equipos y, mediante lo que es el trabajo interdisciplinario, hemos llegado a un punto donde no sólo es necesario tener los equipos en las áreas para abordar, sostener y empoderar a las mujeres, sino que también se ha comenzado a vislumbrar la ferviente necesidad de tener dispositivos para los hombres, porque es una pata más de la problemática integral y sí o sí tiene que estar», finalizó.