Se realizó en el Hospital Interzonal de Junín el acto de bienvenida a los nuevos residentes

Este jueves se realizó en el Hospital Interzonal General de Agudos «Dr. Abraham Félix Piñeyro» de Junín el acto de bienvenida a los nuevos residentes. Se trata de 24 jóvenes profesionales, de distintas disciplinas, que inician una nueva etapa de formación.

La ceremonia contó con la presencia de la directora ejecutiva de Región Sanitaria III, Lucrecia López; y del equipo directivo del HIGA Junín conformado por el director ejecutivo Fernando Crocco y los asociados Cristina Tejo, Cristina Cerulli y Mario Scévola.

En la Residencia de Enfermería en Neonatología ingresaron Débora Samanta Lezcano y Lourdes Pacheco; en Emergentología: Jazmín Caputo; y en Nutrición en Salud Pública y Comunitaria: Rocío Aguirre y Camila Aparicio.

En la Residencia de Obstetricia se sumaron a Gimena Torres y Maira Torres; en Psiquiatría, Wanda Gómez; en Ortopedia y Traumatología, Camilo Gil Noriega y Sergio Castro Díaz; y en Psicología Clínica, María Sol Simonutti y Juan Serra.

En Bioquímica Clínica fueron recibidos Agostina Bertazzo, Karen Reddel y Manuela Sena Herrera; en Trabajo Social, Marina Arsanto, Luna Ferreyra y Sabrina Witting; y en Cirugía General, Giuliana Costantino y Tomás Morales.

Por último, a la Residencia de Toconoginecología se sumaron Pamela Moreyra y María Leticia Vélez; en Anestesiología Juliana Del Rosso; y en Pediatría, Abril Sosa.

En el marco de la ceremonia, el director del HIGA Junín, Fernando Crocco, expresó: “El gobierno bonaerense viene trabajando con una fuerte impronta en el fortalecimiento de las residencias en nuestros hospitales provinciales, aumentando los cupos y mejorando las condiciones de trabajo de los ingresantes para que la fuerza laboral siga eligiendo la salud pública”.

Por último, es importante destacar que las residencias de los equipos de salud, en tanto instancia de capacitación intensiva y en servicio, constituyen un dispositivo central para promover un modelo de atención y cuidado de la salud basado en una perspectiva de derechos. Esto implica fortalecer una propuesta educativa que instale la reflexión permanente sobre las prácticas como motor para lograr la transformación del modelo de atención, priorizando el trabajo en equipo y la construcción de redes de salud.