En un comunicado enviado desde el SUTPA, explican que «nuestro Sindicato viene manteniendo reuniones con Vialidad Nacional y el OCCOVI (Órgano estatal responsable de controlar las concesiones viales) con el objetivo de definir la situación de los actuales contratos de concesión de rutas nacionales, que se encuentran vencidos y fueron prorrogados por el gobierno hasta abril de 2018.
En los últimos días circuló en diversos medios la intención del gobierno nacional de establecer un nuevo sistema en el cual se eliminarían gran cantidad de estaciones de peajes, lo cual supone que 2500 trabajadores del interior del país se queden sin trabajo.
El mal estado de las rutas es consecuencia de 25 años de falta de inversión pública y privada, falta de control del estado y en muchos casos, corrupción de funcionarios públicos y empresarios.
Hace más de 10 años venimos denunciando el pésimo estado de las rutas; sabemos que hacen falta obras y queremos que se hagan. Tener una red vial y caminos rurales del siglo XIX en el 2017 es un despropósito. Pero las transformaciones necesarias para que todos los argentinos tengamos rutas seguras no pueden hacerse despidiendo gente.
Todas las fuentes de trabajo que se ponen en juego con esta intención del gobierno, son de trabajadores de peaje que viven en ciudades del interior cómo Junín, y es en dichas localidades dónde los trabajadores de la actividad vuelcan su salario al consumo. En un país con 35% de empleo en negro y más de 30% de pobreza, poner un palo en la rueda a la ya difícil situación de las economías regionales es una cuestión que debe preocuparnos a todos.
Agotaremos todas las instancias necesarias para que seamos incluidos en la toma de decisiones en defensa de los puestos de trabajo», finaliza
