El Ministerio de Energía definiría a más tardar el lunes próximo el aumento de los precios de los combustibles para el trimestre julio-setiembre, que fuentes del mercado petrolero estimaron que podría ubicarse entre el 5 y el 6 por ciento.
El incremento se definirá en base a la evolución de la cotización del petróleo (Brent), de los biocombustibles y de la variación registrada por el tipo de cambio en el período abril-junio.
Fuentes del mercado petrolero arriesgaron que «podría registrarse un aumento de hasta 5 por ciento en el gasoil y de hasta 6 por ciento en las naftas», mientras que desde la cartera a cargo de Juan José Aranguren se indicó que «el tema se continúa evaluando».
La consideración técnica del Ministerio se realiza en momentos en que el precio del petróleo Brent ronda los 47,50 dólares, la variedad WTI los 46 dólares por barril y el dólar cotiza en torno a los 16,63 pesos a nivel mayorista y a 16,86 minorista.
En el último trimestre los precios de los biocombustibles (etanol-biodiesel) registraron una leve suba, el barril de crudo Brent bajó alrededor de 4 dólares y el dólar aumentó contra el peso alrededor de 5 por ciento.
Con todo, en el ámbito petrolero se analiza que en la consideración del gobierno cuentan, además de la cuestión técnica, otras de carácter económicas por la incidencia en la inflación, y también políticas, referidas al momento de activarlos.
Cabe señalar que por estas revisiones técnicas, en abril-junio el precio del gasoil bajó 2,6 por ciento y el de las naftas 0,1 por ciento.
Con tales ajustes y a modo de referencia, en el caso de las estaciones embanderadas con YPF de la Ciudad de Buenos Aires la nafta súper ronda los 18,43 pesos, en tanto que la nafta Infinia se vende a 20,83 pesos el litro. el Diesel 500 (común) se vende a 16,34 pesos y el Infinia diesel 18,78 pesos el litro.
Desde hace varios meses, los precios de los combustibles en las estaciones con bandera Axion resultan similares a los de YPF.
En el caso de Shell los precios se ubicaron en torno a los 18,83 pesos el litro para la nafta súper y 21,55 en la nafta premium, en la Ciudad de Buenos Aires.
El diesel común se vende a 16,73 pesos y diesel premium a los 19,47 pesos por litro en la CABA.
La fórmula aplicada por Energía se completará con la consideración de un «factor fijo de corrección» respecto del desfase de 2016 entre la alta inflación y los aumentos aplicados a los precios de los combustibles, que acumularon 31 por ciento.
Esto último en base a un criterio que definieron el gobierno y las empresas petroleras, en el contexto de una política de convergencia entre los precios locales del crudo (subsidiados) y los internacionales.
Esta política de precios subsidiados del crudo local (barril criollo) se activó hace varios años para preservar niveles de actividad en la industria petrolera y, aunque con una baja progresiva, se mantiene, y su eliminación total hacia una convergencia se ha visto complicada por la baja del crudo internacional de los últimos meses.
