Un control. Nada más esperá a ver el primer control y te vas a dar cuenta que tiene esa lucecita que aparece de vez en cuando, ni siquiera podríamos atrevernos a pensar cómo todos aquellos que de luz solo pagamos las boletas.
No es casualidad que en Rivadavia de Junín ya avisen que Yanella Tracchia, con apenas 14 años, está llamada a ser la heredera de Meli Garialdi, que se despidió campeona del equipo para ir corriendo atrás de un nuevo sueño con Sarmiento en la Primera B.
Estábamos en la Ciudad Deportiva cuando Poli nos soltó la comparación que no nos habíamos detenido a pensar. Ahí nomás, antes que pudiéramos balbucear una respuesta, cayó una pelota del cielo que Yanella puso a dormir en el pecho, para que siguiera suavecito el recorrido hasta el pie que recepcionó y sacó el pase preciso. ¡Cuánta razón tenías, Poli!
Un día después volvió a salir a la cancha, esta vez en Villa, para jugar ante Defensa en Primera División. Quedamos todos helados cuando una patada durísima la sacó de la cancha, haciendo peligrar su presencia en semifinales.
Por suerte, ella misma se encargó de aclararnos que el fin de semana futbolero que se nos viene no se lo pierde ni loca y que buscará ayudar a Rivadavia a meterse en la final del torneo, tanto en Primera como en Sub-17.
«Todavía estoy medio dolorida, pero llego bien. En el momento del golpe no me asusté, pero después empecé a sentir más dolor y pensé que era algo grave», le contó a Junín 24. Y agregó: «A veces los árbitros tendrían que cuidar más a las jugadoras, porque se deja pegar mucho. Por suerte a mí tanto no me pegan».
Y también por suerte el golpe que sacó a Yanella Tracchia de la cancha de Villa Belgrano, para ser luego trasladada en ambulancia, no fue más que eso, por lo que seguro la veremos saltar a la cancha el sábado… Y quién te dice que también el domingo.
Sobre esas dos semifinales que se le vienen, ante Sarmiento tanto en Primera como en Sub-17, se mostró segura de lo que Rivadavia tiene para ofrecer: «Tenemos equipo. Yo tengo mucha confianza. Estamos unidas».
Yanella admitió, con esa cuota de vergüenza necesaria para no sacar los pies del suelo, que muchas veces le han dicho que tiene cosas de Meli Garialdi. «Me hace sentir valorada y olvidate que también me mete presión. Meli es una genia, me encanta».
El que quiera comprobar con sus propios ojos que no exageramos si decimos que le sobra talento para cumplir ese sueño que tiene de ser algún día futbolista profesional, puede acercarse este sábado, desde las 11.30, a ver la semifinal del Sub-17 ante Sarmiento. No se van a defraudar.
Por Juani Portiglia – @JIPortiglia
