Argentina ocupa el lugar número 13 en el mundo en cantidad de fallecimientos por millón de habitantes. En el continente, Perú, Brasil y Colombia, en ese orden, tienen tasas más altas.
Desde el 7 de marzo hasta ahora, cuando un hombre de 64 años que había viajado a Francia perdió la vida y se transformó en la primera víctima mortal de América Latina, 100.250 personas murieron en argentina a causa del coronavirus. Es una cifra dramática que solo alcanzaron otros 10 países en el mundo.
Es que según el mapa global de seguimiento de casos a la Universidad Johns Hopkins de Estados Unidos, sólo ese país, India, Brasil, Francia, Rusia, Reino Unido, Colombia, Italia, México y Perú.
Según Worldometers, uno de los sitios que elabora estadísticas sobre la pandemia, Argentina ocupa el 13° lugar del mundo en cuanto a muertes por millón de habitantes: son 2.176. Perú, Brasil y Colombia, en ese orden, son los países latinoamericanos que superan a la Argentina respecto de esa tasa.
Uno de cada cuatro de los 100.000 fallecimientos en la Argentina tuvieron lugar en los últimos 50 días. Es que, según el reporte epidemiológico emitido por el Ministerio de Salud de la Nación el 25 de mayo, ese día en la Argentina había muerto 75.056 personas por CoVid-19.
Desde ese reporte hasta el emitido hoy por la cartera sanitaria, que confirma que el país ya sobrepasó los 100.000 fallecimientos por esta condición, pasaron 49 días. En cambio, para alcanzar la marca de las primeras 25.000 muertes por CoVid-19 en la Argentina tuvieron que pasar 222 días: el reporte del 15 de octubre del año pasado fue el que confirmó ese escenario, con un total de 25.342.
Esa diferencia, los 222 días que transcurrieron entre la primera muerte y el informe de más de 25.000 comparados con los menos de dos meses que transcurrieron entre el 25 de mayo y este último reporte, dan cuenta de la notoria mayor circulación del virus en la Argentina.
La tasa de letalidad se ha mantenido, hasta ahora, más bien constante: se estima que el CoVid-19 resulta mortal en el 2,1% de los casos.
Las variantes del virus que han sido consideradas “de preocupación” -alfa, gamma y delta, entre otras- han demostrado, en principio, mayor transmisibilidad más que mayor letalidad: esa aceleración en el ritmo de contagio es suficiente para ampliar la circulación del CoVid-19 y para que, inevitablemente, mueran más personas.
En la Argentina, donde las variantes alfa y gamma circulan sin depender de nexos con personas que hayan viajado y donde ya se han detectado casos de la variante delta, el ritmo de crecimiento de casos confirmados del virus recrudeció de abril en adelante.
En promedio, desde que se produjo el primer fallecimiento por el virus en la Argentina hasta ahora, ocho personas por hora perdieron la vida por esta causa. El impacto fatal de la pandemia se concentró en las personas mayores y en los varones: 8 de cada 10 muertos tenían más de 60 años y el 57% de quienes perdieron la vida eran de sexo masculino.
Según publicó el diario Clarín, el Ministerio de Salud de la Nación estimó que el exceso de mortalidad en contexto de pandemia respecto del umbral esperado para 2020 fue de un 10,6%, correspondiente a 36.306 muertes por encima de lo previsto vinculadas al CoVid-19. Son datos estimados que serán confirmados cuando estén disponibles las Estadísticas Vitales que esa cartera elabora año a año.