En una entrevista con periodistas de la TV Pública, el primer mandatario Alberto Fernández aseguró que la mayoría de los que reciben planes, trabaja, pero en la informalidad. Los planes sociales «tienen que convertirse en trabajo» pero aclaró que debe ser «trabajo formal», ya que «tenemos que recuperar la cultura del trabajo, pero el trabajo formal», puntualizó.
En ese sentido, sostuvo que «hace falta que un mayor número de trabajadores de la economía popular pase a la formalidad, pero hay que darle un marco regulatorio para desarrollarse con un mínimo de seguridad».
Consultado por la inflación, sus causas y sus responsables, Fernández admitió que es un tema complejo y que quiere «quedar bien con Dios y con el diablo», pero alertó que hay «diablos que aumentan los precios y hay que hacerlos entrar en razón».
Consideró que hay «una inflación autoconstruida que tiene mucho que ver el modo en que se concentra la producción de alimentos; hay que llamarlos a la reflexión para que ellos (los empresarios) entiendan que el hecho de que tengan una especie de oligopolio no los autoriza a subir los precios».
Sobre las tarifas, ratificó que «acordamos que no pueden aumentar más del 80% del coeficiente de variación salarial, y para los que tienen tarifa social no más de 40%».
Añadió que «queremos terminar con lo más ineficiente que es subsidiar al más rico. Por eso el primer decil (de la sociedad) termina de recibir subsidios».
En cuanto a los servicios, sostuvo que el Gobierno «está haciendo todo lo necesario para garantizar la provisión de gas» en la próxima temporada invernal.
Al abordar el tema de la deuda externa, el Presidente afirmó que «es una ficción, una mentira» que se diga que había otra posibilidad de acuerdo con el FMI.
«Tuvimos un acuerdo que la ortodoxia del Fondo no aceptaba, dijimos no vamos a hacer ningún ajuste; fue una pelea muy dura, fue un acuerdo inusual, por eso no sabíamos hasta último momento como iba a votar» el directorio del Fondo.
Además, «tenía que haber de parte del FMI un reconocimiento de que hicieron algo que estaba mal», añadió Fernández.
En este punto, enfatizó que a su criterio el tema del acuerdo con el FMI y los debates internos en el oficialismo «está terminado»; y afirmó que «a algunos les gusta más, a otros les gusta menos» ese convenio, «pero hay que seguir adelante». Y sentenció que «cuando dicen que fui blando, no hubo nada blando».