El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Miguel Acevedo, aseguró este martes que la presidencia de Mauricio Macri «fue una desilusión» y lo acusó de no tener «la sensibilidad de escuchar a la sociedad».
«Para analizar su presidencia habría que dejar pasar el tiempo y ponerlo en perspectiva, pero creo que ha ignorado a la industria. Me parece que ha tratado de hacer muchas cosas en la parte institucional, pero en la parte económica se ha cerrado mucho en su círculo. Al principio lo veía como un tipo más abierto en sus pensamientos y de a poco ha ido cerrándose en un grupo que se hablaba a sí mismo. No tuvo la sensibilidad de escuchar a la sociedad. Siento desilusión», afirmó.
En diálogo con radio La Red, el dirigente planteó que la coyuntura económica «es muy mala», pero advirtió que «estamos ahogándonos en un charco». Así explicó su metáfora: «No veo al problema como económico o financiero, sino como político. ¿Se acuerdan de los diez puntos? Eso fue hace tres o cuatro meses. Yo no pido que se cumplan los diez, sino dos o tres. Que se cumplan los contratos, que no haya una devaluación del 30 por ciento cada año, que no tengamos estos niveles de inflación. Tenemos que tener previsibilidad, al menos para empezar…».
Para Acevedo, hoy «hay una desconfianza atroz» en el país y «no de la gente de afuera, sino de los argentinos». Y agregó: «Tenemos más de un PBI afuera. Cuando un argentino compra dólares está financiando a otro país. Es un problema nuestro y no estoy diciendo que esté mal que compren dólares, sino que la causa de que pase eso es que no le tenemos confianza a nuestro país».
Consultado sobre la situación de la industria, el presidente de la UIA explicó que «hay mucha destrucción de valor» y advirtió que «va a costar mucho levantarla». Sin embargo, y más allá de plantear la difícil situación, aseguró que será necesario reabrir las paritarias salariales.
«Se van a tener que abrir las paritarias. El poder adquisitivo ha caído muchísimo y tenemos que empezar a crecer y ver cómo lo recomponemos», dijo. Y concluyó: «Nos va a costar 10 años recomponer el poder adquisitivo».
