Una familia tipo necesitó en octubre ingresos por $ 35.647 para no caer bajo la línea de la pobreza y $ 14.202 para no ser indigentes, según informó hoy el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
De acuerdo a la información oficial, la Canasta Básica Total (CBT), que mide los productos y servicios indispensables para no ser considerados pobres, aumentó el 2,4% respecto del mes de septiembre, casi $ 900 más. En tanto, la Canasta Básica Alimentaria (CBA) que mide el acceso a los alimentos mínimos para la subsistencia, se incrementó el 2%.
De este modo, según el organismo de estadística, el índice de indigencia se incrementó un 45,9% en lo que va del año, mientras que el indicador de pobreza aumentó un 47,1%.
La CBA se determina tomando en cuenta los requerimientos calóricos y proteicos imprescindibles para que un varón adulto de entre 30 y 60 años, de actividad moderada, cubra durante un mes esas necesidades. En función de ello se toma un proporcional para medir a mujeres y niños. Este valor luego se cruza con el índice de ingresos y se determina así el porcentaje de indigencia, en función de las personas que no obtengan el dinero suficiente para costearlo.
En tanto, la Canasta Básica Total amplía la CBA considerando los bienes y servicios no alimentarios, considerados en el índice de precios al consumidor del Gran Buenos Aires elaborado por el Indec. Con estos valores el Indec determina el índice de pobreza.
Una familia tipo se calcula según la siguiente composición: un varón de 35 años, una mujer de 31 años, un hijo de 6 años y una hija de 8.