El coordinador del Área Municipal de Derechos Humanos de Necochea, Sebastián Ebi, aseguró que «esto constituye un hecho revolucionario para la ciudad» y añadió que «Necochea será el primer municipio que hará efectiva la incorporación de personas trans, tal vez de forma paulatina, tratando de llegar al 1% que la ley exige pero con la convicción de estar abonando a la idea de una sociedad más justa y más igualitaria».
La ley de cupo laboral trans 14.783 establece que, en el sector público bonaerense, al menos el 1% de la planta deben ser personas travestis, transexuales y/o transgénero «con el fin de promover la igualdad real de oportunidades».
Aprobada tras varios años de reclamos incesantes por parte de la comunidad trans, travesti e identidades, la normativa recoge la problemática de este grupo, que vive en condiciones de extrema vulnerabilidad social y económica.
Las personas que integran la comunidad trans tienen un promedio de vida de apenas 32 años, con grandes dificultades para acceder a un trabajo «en blanco», debido a la discriminación y marginación que padecen.