El eclipse solar total del 2 de julio de 2019 entró en la agenda de los aficionadosa la astronomía hace algunas semanas -quizás meses-, pero existe un grupo especial de fanáticos que tiene la fecha marcada en sus calendarios desde 2016para movilizarse al lugar del mundo donde se pueda ver el fenómeno con mayor claridad.
Así fue como la provincia de San Juan, y en particular el departamento de Iglesia, entró en el radar de los «cazadores de eclipses» hace tres años. Ahora se espera la visita de 4.500 turistas extranjeros que la coparán, así como también localidades de Mendoza y Córdoba.
«Tenemos el mejor lugar, nos explicaron, por las condiciones de altura y las escasas probabilidades de nubes. El departamento de Iglesia cuenta con todo eso. Nosotros empezamos a leer, a estudiar, y realmente era como La Meca: acá va a pasar el eje del eclipse. Estamos en la trayectoria», explicó a minutouno.comLili Altamira, propietaria de la posada Posta Kamak de Bella Vista.
Altamira y su marido, Guido, dejaron la ciudad de San Juan hace 12 años para radicarse en una finca de 13 hectáreas en Bella Vista, departamento de Iglesia, en busca de una vida sencilla con animales y cultivos. Además abrieron una posada de 15 plazas en una porción del campo, y el 2 de julio su quietud se verá invadida por 800 turistas extranjeros para ver el eclipse.
Los Altamira cerraron hace dos años un acuerdo con Furlong Incoming, una agencia de turismo mayorista con base en Buenos Aires, para recibir a 400 visitantes de Estados Unidos de 12 a 18.30. Se espera que el momento crítico del eclipse sea a las 17.40.
Ahora aguardan por la llegada del doble de gente teniendo en cuenta las excursiones organizadas por otras compañías.
Para prepararse para el evento, los Altamira tuvieron que instalar baños públicos, contrataron 14 food trucks y puestos de comida (con opciones veganas incluidas), y buscaron una cobertura de wifi «más amplia» que la habitual en una zona de no más de 7.500 habitantes sin contar a los empleados de la minera Barrick Gold.
«Estamos a casi 2.000 metros sobre el nivel del mar y al lado de la Cordillera, entonces es un clima seco y las probabilidades de nubosidad son escasas. El eclipse se va a ver en toda la Argentina, pero el que persigue estos fenómenos busca estas condiciones», señaló Altamira.
El eclipse durará apenas 2 minutos y medio, pero la búsqueda del lugar perfecto para verlo empezó hace años, como lo comprobó Silvia Yafar, de la agencia de turismo sanjuanina Money Tur, que vendió en julio de 2016 el primer paquete para visitar Iglesia el martes que viene.
«Ahí empezamos a ver que se venía algo gordo», convino Yafar en una charla con minutouno.com. Hoy en día la empresa tiene cerrados los viajes de 700 personas, muchas de las cuales se quedarán en la ciudad de San Juan y alrededores porque la capital está colmada.
«Mis clientes, que son operadores de turismo de Argentina que venden al exterior, tampoco sabían bien qué pasaba pero les pedían del exterior 50 o 100 habitaciones para la fecha del 2 de julio 2019. Entramos a preguntar y nos enteramos de este eclipse», contó.
El costo de un viaje a la Argentina para ver el eclipse total de sol varía de acuerdo a los aéreos y el itinerario completo de cada pasajero, pero Yafar consideró que «el full day desde San Juan hasta Pampa del Cura, con servicios, comida, coffee continuo, los lentes para ver el eclipse, transporte y todo, está desde US$140″.
El paquete que incluye el transfer desde y hasta el aeropuerto de San Juan, un city tour, una excursión a Ischigualasto para conocer el Valle de la Luna y el full day, o día completo, del eclipse con trasnoche en el hotel 3 estrellas arranca en los US$400.
«Siempre hay nichos específicos», convino Yafar mientras ultima detalles para la suerte de eclipse-fest del martes. «Todos se sorprenden ahora, pero yo lo vengo viendo hace tres años. Me sorprendí cuando me llovieron las reservas. Yo vendí todo en 2016 y 2017», reveló.
«En el 2019 fue poner detalles finales: quiénes es vegetariano, celíaco, bajar o subir habitaciones», explicó la licenciada en Turismo, que no conocía el nicho de los cazadores de eclipses pero ahora es una experta gracias a la ley de la oferta y la demanda del mercado.
«Están viniendo a San Juan más o menos 4.500 extranjeros», aseguró Yafar teniendo encuenta los turistas que eligen alojamientos de alta gama, modestos, en tour o en solitario. «La ciudad de San Juan quedó chica», expresó.
Yafar anticipó que habrá «eventos de todo tipo alrededor del eclipse porque es como una fiesta» que arranca el 30 de junio con la llegada de turistas de Estados Unidos, el Reino Unido, Japón, Corea del Sur, Holanda y 14 países más.
«Hace un año que están al 100% las reservas de las plazas hoteleras. En lo que va de este año se le pidió a las familias que abrieran las puertas de su casa», convino por su parte Lili Altamirano.
La dueña de la posada invitó a los potenciales visitantes -los que no persiguen eclipses- a que visiten Iglesia para apreciar «el cielo diáfano a la noche y la poca contaminación lumínica» que invita a mirar las estrellas todo el año.
Yafar y su equipo organizaron un evento como el de Posta Kamak para 250 personas en Pampas del Cura, un complejo ubicado en Las flores, departamento de Iglesia.