Un fiscal se opuso al pedido de sobreseimiento del músico Cristian «Pity» Álvarez, quien debía comenzar a ser juzgado por el crimen de un vecino, cometido en 2018 en el barrio de Villa Lugano pero que, según su defensor oficial, padece problemas psicológicos y psiquiátricos que le impiden estar en un juicio o comprender la criminalidad de sus actos.
Se trata del fiscal Sandro Abraldes, quien sin embargo en un escrito pidió el cese de la prisión preventiva del acusado debido a su estado de salud mental, aunque solicitó que, como medida de seguridad, permanezca internado dentro del Programa Interministerial de Salud Mental Argentino (Prisma), en el Complejo Penitenciario de Ezeiza.
El dictamen en oposición al pedido de la defensa ahora deberá ser resuelta por el Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional 29, integrado por los jueces Gustavo Goerner, Juan María Ramos Padilla y Cecilia Maiza.
El Ministerio Público Fiscal (MPF) de la Nación informó a través de su sitio web www.fiscales.gov.ar que Abraldes sostuvo que «los profesionales que evaluaron recientemente a Álvarez se limitaron a contestar los puntos solicitados por el tribunal en lo referente a la capacidad para afrontar el debate oral y público; sin que de ello quepa extraer conclusiones referidas a la presunta inimputabilidad al momento de comisión del delito imputado».
El fiscal recordó lo dictaminado tanto en octubre de 2018 como en marzo de 2020 cuando el Cuerpo Médico Forense (CMF) consideró que al momento de los hechos Álvarez (48) pudo comprender la criminalidad de sus acciones.
En ese sentido, señaló que en el artículo 77 del Código Procesal Penal de la Nación se establece que si el imputado se cura, la causa proseguirá, por lo que solicitó que Álvarez sea evaluado periódicamente cada seis meses.
Y al mismo tiempo señaló que, por el momento, el músico no está en condiciones de afrontar un juicio, por lo que corresponde suspender el trámite de la causa.
Según Abraldes, todos los peritos que evaluaron al acusado » supeditaron la posibilidad de reversión de su condición actual a la evolución de sus trastornos y a la respuesta que presente al tratamiento interdisciplinario psiquiátrico, psicológico, neurológico, clínico y social aconsejado».
Y agregó que los mismos peritos «recomendaron el uso de las menores dosis de psicofármacos posibles, puesto que no se puede descartar la influencia de la acción de la medicación suministrada sobre el síndrome depresivo y el trastorno cognitivo diagnosticados».