El presidente Alberto Fernández afirmó hoy que en el momento actual «no hace falta declarar el estado de sitio» pues «el sistema legal funciona como corresponde», pero advirtió que «no le temblará el pulso para prorrogar» el aislamiento obligatorio por el coronavirus «si es para tranquilidad, salud y cuidado de los argentinos».
Asimismo, aseveró que su prioridad es «la salud y la vida» de la gente por sobre la economía.y que el Gobierno va a «gastar lo que sea necesario para que la gente esté tranquila», al tiempo que fustigó a los «tontos e insensibles» que violan las medidas oficiales dispuestas por la pandemia.
Fernández adelantó que mañana lunes se reunirá a las 11 con el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, y los intendentes del primer y segundo cordón del conurbano «de todos los sectores políticos» para «ver qué logística» hay que «desplegar» en el principal distrito del país y reveló que se anunciarán paliativos para sectores afectados por las restricciones y una lista de 2.000 precios máximos.
El mandatario afirmó también que prorrogar el aislamiento social y preventivo, que fue dispuesto hasta el 31 de marzo, es una «posibilidad», y añadió que «no me temblará el pulso si es para tranquilidad, salud y cuidado de los argentinos».
«Estoy tan enojado como cualquiera de ustedes con los que no cumplen, porque no son conscientes del riesgo al que se exponen y al que exponen a otros», dijo sobre los ciudadanos que no respetan las normas del aislamiento social preventivo.
Anunció que el Gobierno dará a conocer mañana medidas para mitigar el impacto de las restricciones para los sectores más afectados, entre ellos monotributistas, pymes, pequeños comerciantes y beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo.
Además, adelantó que el Gobierno avanza en un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) para «prohibir» el corte de servicios esenciales durante el aislamiento, para que «el que no pueda pagar no se quede sin agua, luz, Internet, ni cable».
«Me importa la salud de los argentinos, esa es mi prioridad», dijo el mandatario durante entrevistas que concedió hoy desde la Quinta de Olivos a los canales Telefe y América y a Radio Rivadavia.
Por otro lado, afirmó que «va a haber cada día más casos» de coronavirus en el país pero advirtió que «lo importante es que esos casos se puedan atender» y que no colapse el sistema de salud, por lo que instó a la sociedad a cumplir con el aislamiento.
Al respecto, planteó que «cuesta mucho hacer entender» a sectores de la sociedad que «es por el bien de ellos que se les pide que no salgan».
El Presidente asumió que a raíz del aislamiento total en todo el país va a existir «un parate» de la economía y que deberá ser afrontado «entre todos», pero dejó claro que «la urgencia no es la economía» sino «la vida de la gente».
«Vamos a gastar lo que sea necesario para que la gente esté tranquila», destacó, en referencia a las medidas económicas que serán anunciadas mañana, pero aclaró: «No soy un loco que quiere que quiebre la economía».
En ese sentido, aseguró que «los monotributistas de las más bajas categorías y la gente que no está registrada» van a tener «auxilio del Estado», y anticipó que el Ejército «distribuirá comida en los barrios más carenciados».
Por otro lado, aseguró que por el momento «no» se evalúa el estado de sitio porque, dijo, a la crisis derivada por el coronavirus «no la arregla» esa medida, sino la «conciencia social».
«No quisiera llegar a eso, si se llega a eso solo hablaría mal de la sociedad argentina. Los instrumentos están, las fuerzas están, al que sale sin justificación lo detienen y lo ponen a disposición de un juez, tenemos el sistema legal funcionando como corresponde», enfatizó.
El jefe de Estado dijo que se siente «acompañado por la gran mayoría de los argentinos», aunque habló también de quienes «no entienden» la situación en la que se encuentra el país.
«Lo que más preocupa es la incomprensión de la gente, que haya tontos que no entienden el riesgo en el que estamos. Me preocupa el idiota que circula con fiebre, que lastima la salud de todos. Me preocupa su egocentrismo que no lo deja ver cómo puede dañar al de al lado, pero son los menos, la mayoría está en sus casas», dijo.
Relató que ya «se iniciaron acciones penales sobre más de 2.000 personas en un día» y dijo que «se secuestraron más de 300 autos en los operativos de control» que realizan las fuerzas federales en el área metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
También remarcó que desde el Gobierno se «hizo todo lo que podía hacer» para evitar que el coronavirus «se propague a gran velocidad», y destacó «la respuesta de los profesionales de la salud», que «es maravillosa».
«Para que no nos pase el peor escenario, tenemos que quedarnos en casa y guardar todas las normas de cuidado que existen», dijo y añadió: «Hemos hecho todo lo que debíamos hacer, y ahora depende de que nosotros seamos inteligentes y no tiremos por la borda todo el esfuerzo que se ha hecho».
Por último, anunció que están «comprando respiradores» para proveer a los distritos que lo requieran mientras se intenta aplanar la curva de contagios, con el aislamiento social preventivo y obligatorio dispuesto desde el 20 al 31 de marzo por DNU.