Mabel Edith Sosa y Marcelo Fabián Martinotti encontraron la muerte en la Ruta Nacional 188 a la altura del km. 105,5, en la curva conocida como Mingrone.
Homicidio de Mabel Sosa y Marcelo Martignoni: El conductor de la Hilux “Tenía un pedo bárbaro” sostuvo uno de los testigos
Circulaban en una Renault Duster cuando son embestidos por una Toyota Hilux conducida por un joven rojense, Paulucci.
Hasta aquí, se podría estar frente a un incidente vial con resultado trágico y la pérdida de la vida de dos juninenses. Pero la realidad no termina allí, producto de los elementos que se van sumando a la Investigación Penal Preparatoria y las cuestiones complicadas a resolver.
En el medio, el reclamo de familias y allegados por conocer la verdad sobre cómo se produjo el siniestro que se cobró las vidas de Mabel y Marcelo.
Pero fueron apareciendo “cosas raras” dignas de profundizar en lo que a la investigación respecta.
Y es lo que la fiscal, Dra. Pamela Ricci, está haciendo.
Comenzó después de aquel 12 de enero último y el panorama ha permitido en las últimas semanas, importantes avances.
Por un lado, establecer la mecánica del siniestro y por el otro sumar testimonios que le permitan establecer si Paulucci viajaba luego de haber consumido alcohol ya que la muestra oportunamente tomada en el Hospital Unzué de Rojas había arrojado 0 de alcohol en sangre contraponiéndose a los testimonios volcados en la causa y que no son pocos precisamente.
LA MECÁNICA
Con relación a la mecánica del incidente vial, ya se habría incorporado a la causa, la pericia realizada por Policía Científica.
Aquella noche del 12 de enero, en la Ruta 188 a la altura del km. 105,5, Paulucci, quien circulaba en una Toyota Hilux invadió la mano contraria en el momento que en dirección opuesta viajaban en la Renault Duster, Sosa y Martignoni.
Es decir, Paulucci invadió carril, provocando el impacto contra la Duster causando el deceso de la pareja juninense y termina su recorrido contra un árbol.
Un dato a resaltar es que tal como lo plantearon los peritos, en el punto de impacto se desprenden piezas pequeñas de la camioneta que dejan un surco en el pavimento, como estrías, que explica la posición final de los vehículos.
LA MUESTRA DE SANGRE
Cuando Paulucci fue trasladado aquella noche al Hospital Unzué de Rojas, además de brindarle asistencia se realizó la toma de muestra de sangre que luego sería enviada a la Científica.
El resultado había arrojado la no presencia de alcohol en sangre.
Paralelamente, a medida que la fiscal Ricci fue tomando declaraciones testimoniales, surgió en forma reiterada, la contradicción.
Mientras testigos daban cuenta del consumo de alcohol previo al incidente vial, personal del Unzué que lo había asistido coincidía con el aliento etílico.
Más aún, hasta llegaron a declarar que el mismo Paulucci había manifestado haber consumido alcohol. ”Tenía un pedo bárbaro”, graficó otro de los testigos cuyos dichos están incorporados en la causa.
Planteada la duda una de las profesionales de Científica encargada de llevar adelante las pericias, explicó que cuando procedió a abrir el frasco, tenía una cámara de aire. La sangre no llegaba al tope. Por lo tanto, ese espacio vacío generó una cámara de aire que sería la que permitió que se produjera la evaporación de alcohol”.
Será ahora función de la fiscal establecer si se está frente a una negligencia o una diferencia de criterios entre quien tomó la muestra en el Hospital Unzué y quien realizó la pericia.
Mientras tanto, con los distintos elementos ya aportados en la causa, más los testimonios que aún resta tomar, es posible que se pueda afirmar la presencia de alcohol en el conductor de la Hilux, sin tener la graduación.
Por lo pronto, familiares y allegados a Sosa y Martignoni, reclaman justicia.