Con el incremento de abril último, del 24%, este invierno el gas será un 272% más caro que el anterior. El anterior aumento había sido en octubre pasado, del 203%. En medio de este feroz tarifazo que sufrirán todos los hogares, el Gobierno decidió salir a alentar un proyecto que busca desalentar el uso de los calefones con piloto.
La senadora de Cambiemos Pamela Verasay presentó a inicios de mayo un proyecto de ley para quitar aranceles a la importación de piezas para los calefones y facilitar al Gobierno a tomar más medidas que impulsen el consumo del calefón sin piloto.
El Ejecutivo busca así que se vendan solamente los calefones con encendido electrónico, que son más eficientes que los termotanques y calefones de uso cotidiano.
Según datos del Instituto Argentino de Petróleo y Gas (IAPG), existen en el país 10 millones de calefones y termotanques, cuyos pilotos permanecen encendidos las 24 horas del día. Cada uno de ellos consume 0,5 m3/día, con lo cual 5 millones de m3 diarios de gas se queman solo a través de los pilotos. Eso equivale a la producción de un yacimiento de gas con buen rendimiento en la cuenca neuquina.
De acuerdo a los fundamentos del texto, mantener estufas, calefones y termotanques en piloto equivale a importar 10 barcos de Gas Natural Licuado (GNL) por año. En 2016, Argentina importó 77 buques de ese combustible.
La subsecretaria de Ahorro y Eficiencia Energética, Andrea Heins, explicó en conferencia de prensa que «es más eficiente calefaccionar el ambiente con un aire acondicionado frío/calor a 19 o 20 grados que hacerlo con el artefacto a gas».
