Las cuotas de los créditos hipotecarios bajarán un 10 por ciento en la provincia de Buenos Aires gracias a una ley que sancionó la Legislatura bonaerense para reducir la aplicación de Ingresos Brutos a las entidades que otorgan los créditos.
La Legislatura bonaerense sancionó este jueves un proyecto de ley impulsado por el gobierno de María Eugenia Vidal que baja del 8 a 1,5 por ciento la alícuota del impuesto a los Ingresos Brutos para «las entidades financieras no bancarias correspondientes a los intereses y ajustes de capital de los préstamos hipotecarios otorgados a personas físicas, con destino a la compra, construcción, ampliación o refacción de vivienda».
La baja del 6,5 por ciento impactará en las cuotas de los créditos, ya que si bien formalmente deben pagarla los bancos, las entidades trasladan ese sobrecosto a los usuarios. Según estimaciones del oficialismo, las cuotas bajarán en torno a un 10 por ciento.
El director de ARBA, Gastón Fossati, subrayó que «la medida apunta a reducir la presión tributaria en Ingresos Brutos, de manera de abaratar las cuotas de los créditos hipotecarios y contribuir a que muchos vecinos puedan alcanzar el sueño de la casa propia».