Era pleno mediodía en el barrio El Gaucho, en Mar del Plata. Primero sorprendió a una nena de 10 años cuando salía de hacer los mandados en el almacén y la manoseó. Después, se desnudó delante de una vecina. Quiso escapar pero lo traicionó la única prenda que tenía que puesta. Su campera.
El abusador de 27 años había entrado a la casa de la mujer por el patio trasero pero cuando quiso salir por el frente se quedó enganchado en una reja. Pasaron apenas minutos antes de que el papá de la chica a la que había «tocado» junto con un grupo de vecinos se acercara al lugar.
Casi lo linchan. No solamente lo retuvieron hasta que llegó la policía sino que, enfurecidos, lo atacaron a patadas y golpes de puño en la cara. Lo tuvieron que rescatar los oficiales que lo trasladaron a la comisaría decimosexta donde fue acusado por los delitos de “violación de domicilio reiteradas” y “abuso sexual simple”.