Alejandra y Marcelo viven en Mar del Sur, y desde hace dos años y medio conviven con un carpincho que se crio junto los tres perros de a casa.
El animal llegó a su casa cuando era pequeño: “Lo tenía otro chico luego de que mataran a su madre, pero no lo pudo tener más con él, le comía las plantas y nos lo dejó para que lo cuidáramos, no teníamos pensado inicialmente tenerlo viviendo con nosotros”.
La pareja se fue encariñando y lo bautizaron Marlín, y actualmente pesa 80 kilos de peso y señalan que su comportamiento “sumamente tranquilo”.
Marlín se crio con los tres perros de familia: “Están lo más bien, él tiene su estanque, cuando es verano le ponemos otro por el calor y en invierno siempre anda cerca de la salamandra. Nunca quiso irse, ahora nuestro terreno está alambrado».
Foto gentileza 0223.com
«Es muy manso, come pasto todo el día y también calabaza, maíz y trigo. Sabe abrir puertas, nosotros tenemos la puerta de la habitación cerrada, pero hace un tiempo lo encontramos durmiendo en la cama”, cuenta Alejandra en diálogo con el medio local 0223.
Por su parte, Marcelo lo adiestró en ciertas cosas, al punto de darle de comer y pedirle a Marlín que se siente, y a veces suele salir a pasear con la pareja y sus compañeros perrunos.