La medida, establecida a través de la Resolución 87/2024 y publicada recientemente en el Boletín Oficial, busca garantizar que los consumidores mantengan el control absoluto sobre sus tarjetas durante todas las transacciones comerciales.
Según lo dispuesto por la Secretaría de Comercio, todos los establecimientos que utilicen terminales electrónicas para el pago deberán asegurar que los clientes conserven el control total de sus tarjetas en todo momento durante la transacción. Esta medida, que cuenta con un plazo de 180 días para su implementación, tiene como objetivo prevenir la captura indebida de datos y su uso fraudulento por parte de terceros.
El subsecretario de Defensa al Consumidor y Lealtad Comercial, Fernando Blanco Muiño, ha expresado que esta iniciativa responde a la necesidad de mejorar las prácticas comerciales y reducir los fraudes en el sector. Además, destacó que algunas provincias, como Río Negro, Neuquén y La Pampa, ya habían llevado a cabo pruebas piloto con resultados exitosos, donde los comerciantes no tenían acceso a las tarjetas de los clientes durante las transacciones.
Bajo este nuevo sistema, los establecimientos deberán contar con terminales inalámbricas o ubicarlas de manera que sea el cliente quien las manipule para realizar el pago, evitando así que el personal del local tenga acceso a las tarjetas. Por ejemplo, en restaurantes, los camareros deberán acercar la terminal electrónica a la mesa en lugar de llevarse la tarjeta y el documento de identidad del cliente, una práctica que permitía la captura de datos para cometer fraudes en línea u obtener créditos de manera fraudulenta.
Esta medida representa un paso significativo en la protección de los datos sensibles de los consumidores y en la lucha contra los fraudes comerciales. Ante la creciente preocupación por la seguridad de las transacciones electrónicas, se espera que esta nueva regulación contribuya a brindar mayor confianza y seguridad a los usuarios de tarjetas de crédito y débito en todo el país.