Pablo Moyano abandonó la co secretaría general de la Confederación General del Trabajo (CGT) luego de que el presidente, Alberto Fernández, se reuniera con dirigentes de la central obrera sin su participación.
El denominado sector de «los Gordos» se reunió anoche con el Presidente, un encuentro al que no fue convocado Moyano y del que sí participaron los otros dos co secretarios de la CGT, Héctor Daer y Carlos Acuña. Del encuentro participó toda la «mesa chica» de la central obrera pero ningún representante del Frente Sindical que encabeza Pablo Moyano fue invitado.
Se trata de una nueva ruptura de la CGT por las marcadas diferencias en cuanto a la estrategia de abordaje de la profunda crisis que atraviesa la Argentina.
Se espera que en las próximas horas Moyano oficialice su salida de la conducción de la CGT a través de un comunicado en el que haría explícitas sus diferencias con Daer y Acuña, pero también con el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, con quien nunca tuvo buen vínculo.
El presidente Fernández cenó anoche con la “mesa chica” de la CGT en la quinta de Olivos, en un encuentro planificado por el propio mandatario para recobrar protagonismo y sondear entre la dirigencia sindical la oportunidad para lanzar un posible bono salarial de fin de año dirigido a trabajadores del sector privado. De esa comida, participó también Moroni.
Según había anticipado ámbito.com la ausencia de Pablo Moyano habilitaba una sucesión de especulaciones sobre la interna de la central. Y esa interna finalmente explotó este martes. Es que desde el inicio de la conducción compartida en la CGT Moyano marcó diferencias con la gestión de Moroni en la cartera laboral, que sí contaba con el respaldo de Daer y Acuña.
Incluso, tanto el líder de los trabajadores de la sanidad como el jefe de los empleados de estaciones de servicios tienen funcionarios nombrados en el Ministerio que antes los asesoraban en sus organizaciones. Lo mismo ocurre con otros sindicalistas del grupo de «Los Gordos» de los servicios, como Armando Cavalieri.