Una carnicera de barrio de la localidad santiagueña de Termas de Río Hondo sufrió un insólito robo. Un delincuente ingresó a su local armado pero no buscaba dinero, se llevó siete kilos de asado.
Según consignó La Voz este martes «lo más llamativo es que extrajo un arma de fuego amenazando al comerciante pero no le exigió dinero sino mercadería. Se llevó unos siete kilos de asado (entre achuras y otros cortes de carne) valuados en unos 10 mil pesos».
Nora Valeria Mansilla, propietaria de la carnicería, denunció el robo y aseguró que el delincuente llegó en una moto conducida por un cómplice que lo esperó afuera del local.
El delincuente ingresó al comercio y tenía parte de su cara cubierta por un barbijo, se hizo pasar por un cliente y le pidió a Mansilla: “Dame dos kilos de chorizos y 5 kilos de carne para asado”.
Mientras estaba preparando el pedido, el delincuente le pidió que se apurara, al darse vuelta vio que la apuntaba con un revólver y la amenazó para que le entregara el paquete rápidamente.
Tras conseguir el botín, el hombre salió hacia la calle, se subió a la moto y se dio a la fuga junto a su cómplice. Tomó intervención la Comisaría 50 y el caso pasó a manos de la fiscal Melissa Deroy.
