«Justicia lenta no es Justicia», dice el dicho popular y solo Pablo Musse y su familia podrán juzgar todo lo que rodeó a las anteriores a la muerte de Solange su hija, y las circunstancias que hicieron que no pudiera abrazarla antes que el cáncer terminara con su vida.
Pablo Musse intentó ingresar a la provincia de Córdoba para ver a su hija que ya estaba muy grave, pero el COE no lo autorizó afirmando que no portaba certificado de hisopado negativo y que dos tests serológicos que se le practicaron habían dado positivo.
Musse había partido rumbo a Alta Gracia el fin de semana pasado con permiso de circulación y junto a su cuñada, quien tiene domicilio en la localidad cordobesa. «Pasé por La Pampa, me pararon la Policía y Gendamería, y no tuve ningún tipo de problema. Llegué a Huinca Renancó –donde hay un control de ingreso a Córdoba– y el personal del COE me tomó los datos y me realizó el test serológico», relató Musse en diálogo con Cadena3.
Luego de ese control y de instalarse una aplicación del gobierno de Córdoba para informar de manera constante su ubicación, Pablo continuó viaje rumbo a Alta Gracia. Pero las autoridades le advirtieron que debía repetir la prueba porque el primer test serológico había dado «dudoso» y tiene un periodo de ventana inmunológica de hasta 5 días.
«Me pinchan el dedo y a la media hora me llaman para decir que debía regresar a Neuquén, y que un patrullero me iba a escoltar hasta el límite provincial», relató el padre de la joven fallecida. Para permanecer en Córdoba, Musse debía presentar un hisopado negativo con vigencia máxima de 48 horas y realizar cuarentena en un hotel privado.
Manejó los 1100 kilómetros de vuelta y, a pesar de estar desempleado, pagó los 8500 pesos por un hisopado privado, que le dio negativo. Mientras esperaba el nuevo permiso de circulación, se enteró del fallecimiento de su hija.
Este viernes 21, el juez Federal de Córdoba, Ricardo Bustos Fierro, emitió una resolución para que el padre y una tía de Solange Musse, la mujer de 36 años que murió hoy como consecuencia de un cáncer en la capital mediterránea, se trasladen desde Neuquén para participar de la ceremonia de sepelio.
El magistrado «procede hacer lugar a la medida autosatisfactiva solicitada» por Pablo Matías Musse y Paola Oviedo para que «se trasladen por las rutas provinciales y/o nacionales desde la localidad de Plottier, Neuquén, por las provincias de Río Negro, La Pampa y Córdoba, hasta la localidad de Alta Gracia (Córdoba), y/o donde se desarrolle el sepelio», detalla el texto resolutivo.
Añade que en el viaje deberán «limitarse en el trayecto a las paradas sanitarias mínimas indispensables, con todos los resguardos sanitarios pertinentes».
Solange murió en la ciudad de Córdoba como consecuencia de un cáncer, y a sabiendas de que su estado era terminal había pedido ver a su padre, con residencia en la localidad neuquina de Plottier, quien no pudo ver a su hija porque le impidieron el ingreso a la provincia en un control policial y sanitario.
La mujer se encontraba en la localidad cordobesa de Alta Gracia en tratamiento por un cáncer de mama grado cuatro y, según la información de los familiares, esta mañana sufrió una descompensación y fue derivada al Sanatorio Allende, de la capital de Córdoba, donde murió a poco de ingresar.
«Mi papá lo es todo. Estoy muy triste, ansiaba ver a mi papá. Quiero que entiendan que mientras viva tengo mis derechos y quiero que sean respetados», había manifestado Solange en una carta que se había viralizado en las redes sociales.