Los vecinos de Quilmes desde hace una semana tienen un nuevo habitante que camina por los techos de las casas. Se trata de un mono que se escapó de una vivienda en la que habría estado atado con cadenas.
Según testigos, se trata de un animal dócil y amigable, que acepta toda la comida que le ofrecen y sobre todo los dulces. Al parecer pertenece a una mujer de la zona a la que se le había escapado el año pasado también. Sus vecinos no quieren que vuelva con ella sino que esté en su hábitat natural.
«Estaba triste, decaído. Lo tienen hace varios años en un patio y jugaba con los perros», cuenta una vecina sobre la vida que llevaba encerrado en la vivienda.
Los vecinos denuncian que ya llamaron a Defensa Civil y a la policía, pero nadie los escuchó: «Nos falta llamar a los bomberos nada más», se quejaron.
Se trata de un mono Carayá macho, conocido como el mono «aullador». Es una especie autóctona del norte de nuestro país, Bolivia, Brasil y Paraguay. Según datos de la Fundación Temaikén, el primate más grande de América está en riesgo debido a la amenaza por el tráfico ilegal y la destrucción de su hábitat natural. Vive en los árboles de selvas, bosques y sabanas chaqueñas húmedas.
