La escuelita rural 331 de Río Chico Abajo, Río Negro, vive una situación crítica. El gobierno de la provincia quiere cerrar la institución educativa argumentando la poca cantidad de alumnos. Es que la escuela, al momento, cuenta con una sola alumna en preescolar, Candela, de cinco años, que asiste a clases con la docente y directora Gladys Osovnikar, y 16 adultos en proceso de escolarización.
Los vecinos de la ciudad están en plan de lucha contra el gobierno de Alberto Weretilneck. Denuncian que el estado no reconoce la utilidad comunitaria que tiene el establecimiento educativo para el pueblo. «El gobierno aduce falta de matrícula pero no ve que la escuela es el centro de la vida de la comunidad. Una escuela que cierra deja a un paraje sin su espacio de encuentro independientemente de que existan niños en edad escolar», aseguró Benjamín Catalán, secretario gremial de los docentes.
La escuela primaria 331 de Río Chico Abajo tiene su origen en 1997. Así como reclaman los vecinos, el edificio desde sus comienzos ya era un salón comunitario para el pueblo. La directora del establecimiento educativo Gladys Osovnikar creó una página en Facebook y un petitorio en Change.org, donde piden por la continuidad del colegio y casi 30 mil personas ya lo firmaron.
«Es difícil describir lo que la escuela representa para nosotros. Todos los días, Gladys la directora ayuda a construir un futuro mejor para nuestros chicos. Ese sueño se puede acabar si nos sacan nuestra escuela, que los vecinos mismos ayudamos a remodelar. Un recorte de presupuesto no puede destruir una comunidad educativa», detalla el petitorio en Change.org.
Desde el ministerio de Educación provincial buscan una solución para Candela. Le ofrecieron a la familia de la niña trasladarla a Río Chico para completar su formación primaria en la Escuela 163 y pagarles el alquiler de la casa. «El proceso de escolarización de la niña en cuestión no era continuo ni habitual. Las clases de este año comenzaron en febrero y recién recibió los primeros contenidos de 2017 luego de la segunda quincena de marzo», señaló la ministra de Educación y Derechos Humanos, Mónica Silva.