Así lo sostuvo Cristina Fernández de Kirchner al participar de un acto en Avellaneda junto al intendente Jorge Ferraresi, en el cual el jefe comunal anunció el aumento del 30% a los empleados del municipio y rechazó el ajuste fiscal que intenta imponer la gobernadora María Eugenia Vidal.
Estuvieron presentes en la actividad los diputados y diputadas nacionales de Unidad Ciudadana Vanesa Siley, Magdalena Sierra, Hugo Yasky, Walter Correa y Abel Furlán. Así como también la jefa de bloque de senadores provinciales María Teresa García
“Como militante, como ex presidenta y como compañera de Néstor voy hacer todo lo que esté a mi alcance y pueda para contribuir y lograr que el 10 de diciembre de 2019 otro argentino este en la Casa Rosada para conducir los destinos del pueblo. No importa quién. No me importa quien. Lo importante es tener la suficiente amplitud y generosidad para no preocuparnos los nombres de quién sino de qué es lo que se va hacer. Tenemos que garantizar que quien ocupe nuevamente en nombre del pueblo esa casa de gobierno vaya a respetar el mandato popular”
Ademas agregó que «con la sanción de la reforma tributaria se terminó de consolidar el despojo de 17 millones de argentinos: Jubilados, AUH, que recibían Pensiones No Contributivas, sectores más vulnerables a los que se les sacó la Movilidad Jubilatoria lograda en 2009. Hay que reconstruir muchos vínculos con una sociedad que está siendo despojada de derechos y que tiene grandes problemas que no los resuelven sino al contrario los profundizan. No han resuelto uno solo de los problemas que teníamos. Lo han profundizado todos hasta límites intolerables. No se entiende lo que están haciendo. La verdad que por un momento uno piensa ¿Son inútiles? Uno se pregunta ¿Saben lo que están haciendo?”