¿Cuánto cuesta viajar a la Antártida? el destino cada vez más elegido por los turistas

Ushuaia: la puerta de entrada al séptimo continente

La ciudad de Ushuaia, en Tierra del Fuego, es el epicentro del turismo antártico. Su ubicación estratégica, como la ciudad más cercana a la Península Antártica, la convierte en el punto de partida ideal para expediciones hacia el continente blanco. El puerto de Ushuaia es el principal enlace para los cruceros antárticos, mientras que el Aeropuerto Internacional Malvinas Argentinas juega un rol clave en la conexión de turistas nacionales e internacionales.

Durante la temporada 2023/2024, más de 111.000 cruceristas visitaron la Antártida, realizando 447 viajes en 55 buques que partieron desde Ushuaia. Este crecimiento ha llevado a mejoras en la infraestructura local, como la inauguración de una sala VIP en la terminal aérea para optimizar la experiencia de los viajeros.

Opciones y costos para el turismo antártico

El turismo en la Antártida abarca una amplia gama de experiencias, desde cruceros tradicionales hasta viajes temáticos que combinan aventura y lujo. Los precios oscilan entre los 5.000 y los 100.000 dólares por persona, dependiendo de la categoría del crucero y las actividades incluidas.

Entre las opciones destacadas se encuentran:

• Bautismo de hielo (Polar Plunge): un chapuzón en aguas heladas con temperaturas bajo 1°C.
• Glamping: alojamientos exclusivos en domos sobre la nieve, con vistas únicas.
• Avistamiento de fauna: pingüinos, ballenas, focas y aves marinas en su hábitat natural.
• Deportes y aventuras: kayak, esquí, trekking, buceo y paseos en helicóptero o zodiacs.

Historia del turismo antártico

El turismo en la Antártida comenzó en 1958, cuando el buque argentino Les Eclaireurs transportó a los primeros visitantes al continente helado. Desde entonces, especialmente a partir de los años noventa, la popularidad de esta actividad ha crecido exponencialmente.

Hoy, más del 90% de los turistas llegan a bordo de cruceros que recorren la Península Antártica, las islas Shetland del Sur y, en algunos casos, las islas Georgias del Sur y Malvinas. Estos viajes, que tienen una duración promedio de entre 10 y 20 días, se realizan principalmente durante los meses de noviembre a marzo, coincidiendo con el verano antártico.

Impacto ambiental y turismo responsable

El turismo en la Antártida plantea desafíos ambientales. Las visitas coinciden con la época de reproducción de muchas especies, lo que puede alterar sus hábitats. Además, el uso de embarcaciones aumenta el riesgo de contaminación marina, como derrames de hidrocarburos.

Para mitigar estos efectos, el Sistema del Tratado Antártico y la Asociación Internacional de Operadores Turísticos Antárticos (IAATO) han implementado estrictas directrices. Estas buscan proteger el medio ambiente antártico, minimizar la huella de carbono y garantizar la preservación de este invaluable ecosistema.

Viajar a la Antártida es una experiencia única, pero requiere de un compromiso consciente por parte de los viajeros para preservar la majestuosidad y fragilidad de este rincón del planeta.