Una interna entre barras de Sarmiento termina con la vida de un hombre joven que nada tenía que ver con el conflicto. Daniel Zapata, su mujer y el hijo de la pareja, de manera increíble y absurda se transformaron en víctimas de delincuentes que los interceptaron al confundir al conductor de un Fiat Uno color celeste con el objetivo que indudablemente se habían trazado.
La muerte de Daniel termina siendo la consecuencia de una violencia que crece y se multiplica y en la que terminan transformándose en víctimas, ciudadanos comunes que eligieron en la vida el camino de la familia, el trabajo, el aspirar a dar a sus hijos un futuro mejor.
Para intentar entender qué sucedió el viernes apenas pasadas las 19:30, en Ruta 65 entre Ramón Hernández e Intendente de la Sota, es indispensable relatar dos historias. Por un lado, la de Daniel Zapata, un trabajador, un hombre de vida ordenada, que había podido adquirir apenas unos días atrás, -no más de tres- un auto. Un Fiat Uno celestito. Junto a su familia, uno imagina que comenzaban a disfrutar del coche. Venían circulando cuando al llegar a la altura de la Ruta 65, baja la velocidad esperando el momento apropiado para cruzarla.
Por otro lado, dos sujetos subidos a una moto de 110 c.c. de cilindrada, color gris, se cree que intentaban localizar a un sujeto con quien mantendrían un conflicto e intentarían darle un escarmiento o ajustar cuentas. En este punto vale aclarar que el objetivo de los motociclistas manejaría con frecuencia un Fiat Uno de características similares a las de Daniel Zapata.
Al llegar al cruce con Ruta 65, se equivocan. Confunden a Zapata, se acercan al coche, uno de ellos dice “Chucky” y sin mediar palabra, le disparan.
Luego, el caos, la desesperación. Los agresores huyen y al hombre herido y prácticamente inconsciente lo trasladan a la guardia del HIGA.
La bala había impactado en el abdomen de la víctima y con urgencia debieron intervenirlo quirúrgicamente. El proyectil había producido lesiones gravísimas en órganos vitales. Finalizada la cirugía, Daniel Zapata quedó alojado en Sala de Terapia Intensiva del HIGA.
Al mismo tiempo, funcionarios policiales iniciaban la búsqueda de los agresores, que tras la agresión habían fugado por Intendente de la Sota en dirección a Pastor Bauman. En el centro asistencial público, familiares y amigos del herido no entendían qué estaba pasando hasta que alguien le dice a un allegado que la bala iba dirigida al barra de Sarmiento. Logran entrevistarse con el hincha que les habría dicho que “esa bala era para mí. El que me quiere matar es…..”
ALLANAMIENTO
En la urgencia y con intervención de la fiscal de turno, Dra. Fernanda Sánchez, ya en conocimiento de lo que estaba ocurriendo, se realiza un allanamiento en la urgencia, en una propiedad ubicada en el Barrio San Jorge.
Aprehenden a ocho personas –tres menores y cinco mayores de edad- y se les escapa, previo descartar un arma de fuego, el sindicado como autor del disparo.
EL DECESO
En la mañana de hoy y a pesar del esfuerzo de los profesionales, murió Daniel Zapata como consecuencia de la herida que le provocó el disparo y que había interesado órganos como intestinos, hígado y bazo. Informada la familia que aguardaba noticias, se generaron graves incidentes. Debieron intervenir efectivos policiales que llegaron en minutos para evitar que la situación se fuera de control.
ESTA TARDE
Mientras desde la fiscalía dispusieron numerosas medidas, entre ellas la realización de la operación autopsia, el movimiento en el edificio San José era intenso ya que eran trasladados los aprehendidos para tomarles declaración con el objeto de esclarecer el homicidio y definitivamente identificar a los ocupantes de la moto de 110 c.c. de cilindrada.
Un elemento de importancia para la causa son las imágenes de las cámaras del Centro de Monitoreo, ya que quedó registrado el ataque sufrido por la familia Zapata.
