Ayer sábado por la mañana, una familia juninense pasó de la alegría a la tristeza y la amargura total en cuestión de segundos. Habían dejado su auto estacionado en Ataliva Roca y Moreno, alrededor de las 10 de la mañana para asistir al Tedeum y los festejos previstos en Plaza 9 de Julio, y cuando llegaron a las 11, les habían abierto las puertas del vehículo para sustraerle varios elementos de trabajo.
Mientras el Intendente dirigía sus palabras alusivas a la independencia de nuestra Patria, los delincuentes hacían de las suyas y privaban a un trabajador de poder dedicarse a su oficio, y en consecuencia, asistir a su familia. Con un elemento metálico forzaron la cerradura de la puerta del auto, la abrieron y se llevaron $700 pesos, un teléfono celular, y tras destrabar los asientos traseros accedieron al baúl y se llevaron un rotomartillo, un taladro atornillador, un nivel láser, un balde con varias herramientas, tijeras de corte recto, serruchos de placa de yeso, cintas métricas, destornilladores, cuters, cajas de tornillos, amoladoras, discos, y demás elementos, por un valor aproximado de $250.000.
Lo ocurrido debería ser un llamado de alerta al área de Seguridad del Municipio para que en futuros festejos se pueda disponer de efectivos policiales que recorran al menos los sectores circundantes para disuadir cualquier tipo de delito como el ocurrido ayer. Sí había agentes viales en las intersecciones de calles donde estaba cortada la circulación al tránsito vehicular, como por ejemplo en Moreno y Álvarez Rodríguez y en XX de Septiembre y Canavesio.