La famosa vidente búlgara Baba Vanga, conocida por sus profecías que se han cumplido a lo largo de los años, como la Segunda Guerra Mundial y el atentado a las Torres Gemelas, ha dejado una predicción inquietante para 2025 que ha alarmado a la humanidad.
La predicción de Baba Vanga para 2025 que alertó a la humanidad
Antes de su muerte en 1996, Vangeliya Pandeva Gushterova, conocida como Baba Vanga, predijo varios eventos futuros. Según informes recientes, la clarividente advirtió que el fin del mundo comenzaría en 2025 debido a un conflicto en Europa que devastará la población del continente. Aunque afirmó que la humanidad no será exterminada hasta el año 5079, señaló que el apocalipsis empezará el próximo año.
Las predicciones de Baba Vanga para otros años
- 2028: Los humanos comenzarán a explorar Venus como una nueva fuente de energía.
- 2033: Los glaciares de todo el mundo se derretirán, elevando el nivel del mar a alturas drásticas.
- 2130: Los humanos tendrán contacto con extraterrestres.
- 2170: Se espera una sequía impresionante en distintas partes del mundo.
Quién fue Baba Vanga
Baba Vanga nació en Strumica, un pequeño pueblo de la República de Macedonia, el 31 de enero de 1911 y falleció a los 85 años, el 11 de agosto de 1996. Desde pequeña, su vida estuvo marcada por la tragedia, ya que su madre murió cuando ella era muy joven. Creció con la ayuda de sus vecinos hasta que su padre se volvió a casar.
Un evento crucial en su vida ocurrió a los 12 años cuando, según su relato, un tornado la levantó en el aire y la arrojó 400 metros a un campo cercano. La encontraron con los ojos cubiertos de arena y polvo, lo que provocó la pérdida de su visión y la dejó ciega.
A lo largo de su vida, Baba Vanga predijo varios eventos importantes, como el comienzo y el final de la Segunda Guerra Mundial en 1939, la desintegración de la URSS en 1979, y el ascenso de China como potencia mundial en 2018.
Para sus seguidores, Baba Vanga sigue siendo una vidente capaz de comunicarse con los muertos y tener visiones sobre el futuro, asegurando que sus profecías eran posibles gracias a la presencia de espíritus que le informaban sobre las personas y sus vidas.