La automotriz china Leapmotor, parte del grupo Stellantis, comienza su expansión en Sudamérica con el SUV híbrido C10. Ya fue confirmado en Brasil y Chile, y Argentina podría ser el próximo mercado.
Leapmotor desembarca en Sudamérica: la marca china de Stellantis que podría llegar a Argentina
El gigante automotor Stellantis continúa reforzando su estrategia de movilidad sustentable en la región, y ahora suma a Leapmotor, una marca china especializada en vehículos electrificados que proyecta un fuerte desembarco en Sudamérica. Con presencia ya confirmada en Brasil y Chile, todo indica que Argentina sería el próximo país en sumarse a esta expansión.
Fundada hace apenas nueve años, Leapmotor logró un crecimiento acelerado en el competitivo mercado automotor, con casi 300.000 vehículos vendidos en 2024, el doble que el año anterior. Este impulso global se refleja en su estrategia de penetración regional, que arranca con el Leapmotor C10, un SUV mediano híbrido enchufable que combina rendimiento, autonomía y tecnología.
El Leapmotor C10, ya disponible en Europa, se prepara para llegar a Sudamérica con una importante actualización técnica. Cuenta con un motor naftero 1.5 litros y un motor eléctrico que, gracias a su paquete de baterías, permite recorrer hasta 210 kilómetros en modo 100% eléctrico, alcanzando una autonomía total de 1.190 km combinando ambas fuentes de energía.
Actualmente, el Centro Técnico de Stellantis en Sudamérica, ubicado en Brasil, realiza pruebas con una flota del modelo C10 para adaptar el producto a las exigencias del consumidor regional. Estas evaluaciones definirán el equipamiento y versiones que se ofrecerán en cada país.
¿Leapmotor llega a Argentina?
Consultado sobre la posibilidad del arribo de la marca al país, Martín Zuppi, presidente de Stellantis Argentina, aseguró que se trata de una «posibilidad concreta» y que la llegada de Leapmotor permitiría reforzar el abanico de vehículos electrificados que actualmente ofrecen las marcas del grupo en el mercado local.
La llegada de Leapmotor a la región no solo marca un hito en la oferta de movilidad eléctrica en Sudamérica, sino que también evidencia el rol protagónico que tendrá China en el futuro de la industria automotriz.