Este sábado falleció a los 92 años de edad Félix Tanino, ícono de la moda y la sastrería juninense por siete décadas.
El 31 de diciembre de 1949, a las 23.45 de la noche, descendía por la escalera de un barco que amarraba en el puerto de Buenos Aires, procedente de Italia, Félix Tanino.
Con un bagaje de sueños y expectativas a cuestas, no sin incertidumbre, el joven Tanino -por entonces de unos veinte años- comenzaba a escribir otra página de su historia, la que desarrollaría en nuestra ciudad hasta llegar a hoy, convertido en un sinónimo de elegancia en el vestir masculino, con sesenta años de destacada trayectoria comercial.
Nacido en la ciudad de Asti, ubicada al norte de la región del Piamonte, comenzó su oficio de sastre a los diez años, apenas terminado su paso por la escuela primaria, la cual desarrolló en su lugar natal hasta los veinte años. En ese momento, Italia comenzó a transitar un problema limítrofe con la vecina Yugoslavia -cuando los recuerdos de la Segunda Guerra Mundial aún estaban frescos- por lo cual su madre le pidió -casi lo obligó- a que emigrara, aún contra su voluntad.
Llegó a Junín donde vivía un hermano de su padre, junto a su familia. El lo cobijó en los primeros años. A los tres días de haber arribado a la ciudad, empezó a trabajar en la sastrería de Tomino, en Arias 77. Al año y medio se independizó, comenzando con un pequeño local en Primera Junta y así se fue desarrollando hasta el presente.
Cuando trabajaba en la sastrería de Tomino, Félix comenzó a concurrir a una academia para aprender a hablar el castellano, lo cual lo favorecía aún más en su relación social e integración en la comunidad.
«Afortunadamente puedo llevar adelante aún mi negocio y con gran voluntad lo puedo realizar. Hace 70 años que tengo la aguja en la mano y en Junín llevo 60. Siempre tomé al trabajo como algo necesario y no podría vivir de otra manera», expresó Tanino en un reportaje que le realizó el periodista y recopilador histórico juninense Roberto Carlos Torres director del sitio web https://www.juninhistoria.com/
VOLVER A LAS RAICES
Once veces viajó Félix Tanino a Italia, donde aún tiene un hermano en la ciudad de origen. «Yo no me olvido de mi familia, porque es extraordinaria», destacó.
Recordó que «mi madre se quedó dolorida. Cuando fui a Génova para embarcarme, estaba tan triste y amargado que no saludé a mis padres cuando subí la enorme escalera del barco. A mi papá no lo vi más porque falleció cuatro años después por un accidente pero sí tuve la suerte de volver a ver a mi madre, que hasta estuvo dos veces acá en Junín».
SIETE DECADAS JUNTO A LA ELEGANCIA JUNINENSE
«Desde el primer día que me instalé, allá en 1951, hasta ahora, siempre traté de atender a la gente como pude, con mucho esfuerzo y sacrificio. Tuve momentos de mucha tarea. Trabajaba hasta las cuatro de la mañana, momento en que entraba un oficial sastre que me reemplazaba», recordó en la entrevista con Roberto Torres efectuada en 2011.
Cuando hace 71 años se introducía Félix Tanino en el mundo del vestir en nuestra ciudad, Junín tenía setenta sastres, una cantidad que hoy ha ido disminuyendo.
Perseverancia y constancia son las dos grandes características que llevaron a Félix Tanino -de 81 años de edad- a continuar en esta tarea durante seis décadas.
«Las marcas a mí me son relativas. Yo voy a la prenda, en cómo está elaborada. Yo trato de comprar lo que me ayuda a vestir bien a la gente. En esto me mantengo firme desde hace mucho tiempo», resaltó.
El mundo de la moda, de la calidad en la elegancia del vestir bien, hoy también se ven prolongados por su hija quien a pesar de haberse graduado como contadora pública nacional, «está siguiendo un negocio de este rubro», destacó Félix quien también se mostró muy orgulloso al comentar que «tengo dos nietas, una de las cuales, no sé si por influencia del abuelo o de la mamá, decidió estudiar diseño de moda, en la Universidad, en Buenos Aires».