Postergan el juicio por la muerte de Diego Maradona que iba a empezar el 1° de octubre

La Justicia argentina ha dispuesto que el juicio por la muerte de Diego Maradona, previsto inicialmente para comenzar el 1° de octubre de 2024, sea postergado hasta el 11 de marzo de 2025. Ocho profesionales de la salud están acusados del delito de “homicidio con dolo eventual”, lo que implica penas que podrían oscilar entre los 8 y 25 años de prisión.

Motivos de la postergación

La decisión fue tomada por los jueces Maximiliano Savarino, Verónica M. Di Tommaso y Julieta Makintach, tras aceptar un pedido de postergación por parte de los abogados defensores de tres de los imputados: la psiquiatra Agustina Cosachov, el neurocirujano Luciano Leopoldo Luque y el psicólogo Carlos Ángel Díaz. Este pedido se basaba en la existencia de cuestiones pendientes, como una pericia psiquiátrica y otras investigaciones técnicas relacionadas con la autopsia del exfutbolista.

El Ministerio Público Fiscal y las querellas, que representan a los hijos de Maradona, no se opusieron a la suspensión del proceso, lo que permitió que se fijara la nueva fecha para el próximo año.

Un juicio único en la historia judicial argentina

El caso Maradona se ha convertido en un hecho sin precedentes en la historia judicial argentina, ya que el 13 de agosto de 2024 se determinó que habrá dos juicios separados: uno por jurado popular para la enfermera Gisela Dahiana Madrid y otro ordinario para los siete profesionales restantes. Rodolfo Baqué, abogado de la enfermera, destacó la importancia de esta decisión, señalando que su clienta será juzgada por 12 jueces del pueblo, mientras que el resto de los imputados enfrentará a jueces técnicos.

Acusaciones y lo que se busca determinar

Entre los acusados se encuentran, además de Cosachov, Luque y Díaz, Nancy Edith Forlini, Mariano Ariel Perroni, el enfermero Ricardo Omar Almirón y el médico Pedro Pablo Di Spagna. La autopsia de Diego Maradona reveló que su muerte fue causada por un «edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada» y que padecía de una “miocardiopatía dilatada”.

El juicio busca esclarecer si los imputados fueron negligentes en su atención médica, desestimando las graves enfermedades preexistentes de Maradona, lo que podría haber contribuido a su fallecimiento el 25 de noviembre de 2020 en Bella Vista.