En la noche de este viernes se realizó la presentación del libro «Pasado no pisado», de Tomás Szumillo», con prologo del rector Guillermo Tamarit. La actividad se desarrolló en el Salón de la Democracia Argentina, Libertad 555.
En esta presentación se proyectaron imágenes que muestran la partida de los combatientes desde Junín, pertenecientes a la colección de Alberto Haylli, recuperados por el «Proyecto Haylli» .
Szumillo destacó en la presentación que este libro es básicamente testimonial a partir de un diario de guerra que el mismo autor fue escribiendo y en la época de pandemia le fue dando forma narrativa. «No hay una sola verdad y cada compañero veterano tiene su experiencia . Este libro cuenta mis experiencias de un chico de 20 años que debe atender las necesidades sanitarias de mis compañeros y a su vez cuidar su vida», indicó.
Además agregó que el libro tiene comentarios humorísticos o irónicos que hacen mas llevadero el libro. «Hay que verlo y leerlo con cierta soltura y deja de ser una fría cronología», manifestó el autor quien además detalló que en su obra se van «uniendo eslabones de la historia comenzando con una etapa de ciertas vacaciones antes del conflicto armado hasta terminar con el final que todos conocen» aclarando que no fue su intención escribir un libro de estrategia militar
«Mi animo es solo transmitir ni experiencia real y concreta de esa parte de mi vida», reflejó el autor quien es médico y en el momento de la guerra tenía 20 años y se desempeñó, por su profesión, en el área de sanidad.
«El libro hay que leerlo con una mentalidad de hace 40 años» graficó Szumillo haciendo hincapié en que «debemos ubicarnos en el tiempo para leerlo»
Durante la presentación, el autor fue contando distintas vivencias en el frente como también las cartas recibidas como la de la juninense Laura Escudero quien en ese tiempo estaba cursando sus estudios primarios en una escuela de nuestra ciudad. También hizo referencias a las encomiendas y mensajes que sus padres le enviaban al frente y así llegó 21 de mayo cuando se produce el desembarco ingles en Malvinas cuando -destacó- «a partir de allí comienza otra etapa de la guerra».
«No me puedo quejar de que pase hambre» dijo Szumillo en un momento de su relato y en esta etapa señaló que «agradecíamos cada día que empezaba» quien también comentó de noches interminables debido a los bombardeos
«:La mayoría pensábamos que éramos boleta» grafico Tomas al describir el animo en este tiempo de la guerra. Relato también los sucesos desde el 13 de junio hasta el final de los enfrentamientos en el marco del conflicto bélico.
Además derribó algunos mitos de la guerra como el hecho de que «los gurkas no entraron en combate directo sino que eran de reserva y refuerzo pero vivíamos con el fantasma que nos habían generado».
«En un escenario dantesco emprendemos la retirada hacia el 14 de junio día de la rendición argentina», recordó.
En el hospital de Puerto Argentino Szumillo se unió al equipo de Sanidad que se encontró con situaciones que desbordaron al hospital. El médico y su grupo pasó una noche como prisionero y luego fueron trasladados al Camberra que supuestamente había sido hundido.
«Volvimos en el Camberra y llegamos a Puerto Madryn y desde allí a Trelew para ser derivados vía aérea a Campo de Mayo», señaló sobre el retorno al conflicto tras el conflicto.
Del tiempo de posguerra menciono dos hechos que lo conmovieron de otros tantos como la reunión por los 30 años de la guerra de Malvinas después de que los primeros años fueron de abandono. Szumillo mencionó que se acercó al Centro de Veteranos de Guerra de Malvinas de Junín 25 años después del conflicto
Rescató también el homenaje y reconocimiento realizado por el Regimiento 7 de Infantería en La Plata al que pertenecía el medico
«Mi deseo es que ningún veterano sufra necesidad de ningún tipo», destacó ya en la parte final de la presentación en el Salón de la Democracia y además puso de relieve que «este es el momento de honrarlos y darles todo el apoyo. La idea es trascender a las generaciones para entender lo que pasó».
Además puntualizó que su anhelo es que «la causa Malvinas pueda llegar a ser el nexo de unión de los argentinos, un pueblo tan dividido».
«Lo único que nos une -añadió el escritor- es la selección, y la causa Malvinas. Lo único que puede llevarnos a una unidad como emblema. Siempre somos dicotomía y espero que la causa Malvinas sea unión y que tanto dolor no haya sido en vano»