Vecinos y comerciantes de calle Rivadavia que han manifestado su preocupación por la futura obra del paso bajo nivel. Ellos elevaron notas al gobierno municipal y a Sociedad Comercio e Industria. La entidad empresaria los recibió y gestionó una reunión con el secretario de Obras y Servicios Públicos municipal Marcelo Balestrasse y dos ediles donde plantearon la preocupación existente en torno a la futura obra del paso bajo nivel.
«Lo que más queremos es una respuesta del intendente», señalaron en diálogo con JUNIN24 ya que afirman que «con el cierre de esta calle nos quedamos sin trabajo. las gomerías, la estación de servicio, la heladería. Es totalmente perjudicial y hay cosas que se pasaron de largo como el impacto ambiental y la audiencia pública que no se hicieron, y están establecidas por ley», dijo uno de los comerciantes entrevistados.
«Vamos a perder el trabajo si se hace esta obra», indicaron y manifestaron que «esperamos que el intendente nos reciba para saber si se hace la obra, que solución nos da», dijo a este portal Walter Cullerton.
A su vez Mateo Ciampagna dijo que «la consulta es fundamental. Hay una ley que establece que se debe hacer una audiencia pública ante una obra de esta magnitud que actualmente es desmesurada porque cuando se planteó había 18 trenes por día pero hace quince años que hay un solo tren por día. la consulta pública es fundamental. Qué va a pasar si esta obra tarda tres años en realizarse. Hemos visto en Capital Federal con proyectos faraónicos, que no se puede realizar porque los vecinos se opusieron y hay una ley que da el derecho a los vecinos a expresarse su opinión porque es el que vive en el lugar donde se hace la obra».
«El otro aspecto que es importante es que ninguna de las autoridades, ni nacionales, ni provinciales, ni municipales hablaron con nadie, ni los legisladores se reunieron con nadie. Muchos son conocidos, tienen trato frecuente y sin embargo nadie se imagina todo lo que va a pasar en el medio cuando empiece a hacerse el túnel y las secuelas que van a quedar urbanísticas», advirtió Ciampagna quien insistió en la necesidad de la audiencia pública y que «se exploren otras alternativas si es que realmente se quiere facilitar la comunicación entre un lado y otro de la ciudad partido por el ferrocarril, pero eso significa un tema de estudio. No se ha consultado a los colegios de Arquitectos o de Ingenieros que siempre tienen una opinión fundada», concluyó.
También Fabián Adaro manifestó su preocupación. «No sabemos qué hacer. Es nuestra fuente de trabajo. Cumplimos con los deberos y los derechos donde están. Adonde vamos, junto con la gente que trabaja conmigo. No estamos ni a favor ni en contra de la obra pero como comerciante de toda una vida hoy me encuentro con el perjuicio de que acá a seis meses nos cierran el paso a nivel y entonces qué hacemos. Nos merecemos el respeto y la consideración de que nos den explicaciones».
