En el año 2013 Sergio Massa junto a un grupo de intendentes entre los que se encontraba Mario, crearon un espacio político que a partir de las coincidencias ideológicos, pero fundamentalmente generacionales, promovía valores como el diálogo, el alcance de consensos, el respeto a las diferencias, la igualdad de oportunidades, que apostaba a la industria nacional, la generación de empleo, la profesionalización de la seguridad, la protección del salario, entre otros.
Ya por esos años, Sergio planteaba que el salario era remuneración y no ganancia, y demandaba la necesidad de actualizar la escala del impuesto a las ganancias para que las actualizaciones del salario frente a la inflación no se quede con un porcentaje del derecho obtenido. Nunca cesó en ese reclamo.
Ese planteo no se reducía a una acción opositora al gobierno de turno sino a la convicción política de proteger el salario de las y los trabajadores. Así es que, siendo parte de la actual coalición de gobierno, defendió con coherencia y planteó con la misma vehemencia tanto al presidente, como al ministro de economía, la necesidad de modificar el piso, para que el tributo no alcance a más argentinos.
Esta medida que en Junín beneficiará a 1037 trabajadores y trabajadoras, obviamente no resuelve los problemas de fondo de la economía, pero lo que es seguro, es que el salario genera consumo, el consumo actividad económica y la actividad económica, más trabajo.
Creo que este tipo de acciones, coherentes con los valores y los compromisos asumidos, nos aporta previsibilidad y nos permitirá a los argentinos construir los consensos que necesitamos para enfrentar nuestras dificultades.