La aprobación del proyecto de “Ficha Limpia” en la última sesión del Concejo Deliberante fue sin dudas polémica.
No, desde mi punto de vista, ya que considero positivo para la democracia y para la transparencia institucional que existan ordenanzas que regulen y condicionen el acceso a la función pública para aquellos que han sido condenados por delitos, como los que establece la misma ordenanza, y que tengan condena firme.
Pero como todo lo que se debate en el contexto de la “grieta”, se distorsiona y cada uno intenta llevar agua para su molino y hablarle sólo a su rebaño; las virtudes de la ejemplaridad, la honestidad y la idoneidad que deberían estar fuera de discusión y son inherentes a cualquier persona que pretenda ocupar un cargo público, quedan subsumidos en una discusión de sordos.
Para dialogar es mucho más importante escuchar que hablar.
Era inevitable comenzar ésta nota, con la referencia a lo acontecido y que se llevó las luces mediáticas, pero también sucedieron otras cosas en el Concejo Deliberante.
Así es que, reitero lo que exprese en mi intervención acerca de la aprobación del proyecto de la Zona de Actividades Logísticas; que teniendo en cuenta los intereses de los juninenses, resulta un paso adelante para el progreso de la ciudad.
El proyecto que fue analizado, debatido y aprobado por unanimidad por los concejales demuestra que es posible, más allá de las diferencias políticas, encontrar acuerdos que sean beneficiosos para Junín y eso es lo que sucede cuando se trabaja pensando estratégicamente en el futuro.
El tratamiento que tuvo el tema, su trabajo en comisión, las observaciones de los ediles, las respuestas de los funcionarios del departamento ejecutivo y las conclusiones a las que se arribaron es el camino que debemos recorrer los que representamos a la ciudadanía.
Me parece que éstas deben ser las formas en las que deben trabajarse estos proyectos que tienen que ver con la calidad de vida de los vecinos.
Todas las iniciativas públicas o privadas que fomenten la generación de empleo, que inviertan en el mejoramiento del entramado productivo de Junín, y que sean un avance sustentable y sostenido para el desarrollo económico y la mejora de la infraestructura de muestro partido, van a tener siempre el acompañamiento de la Unión Cívica Radical.
Pero también hay que decir que desde su inicio (se remonta al año 2013), éste ha sido un tema polémico. Tanto por su origen, como también por el tiempo transcurrido sin activación política en búsqueda de una solución, hasta el momento.
A primera vista, el acuerdo alcanzado podría aparentar un mal negocio para el municipio y una excelente oportunidad para un privado.
Por eso, cuando está en juego el patrimonio de los juninenses hay que ser responsables y trasparentes en la administración de la cosa pública.
Detrás de Soluciones Químicas S.A., hay un conglomerado de empresas, seguramente uno de los grupos empresarios más importantes de la Argentina.
Por lo que aspiro, a que la obra se concrete rápidamente y que derrame su beneficio en Junín.
Parto de la idea que las iniciativas vinculadas a la producción y al empleo no deben tener banderías políticas, ni estar presas de disputas sectoriales; son en primera instancia ideas y proyectos, que se convierten en políticas públicas, para luego con el paso del tiempo, cuando trascienden los gobiernos y las gestiones de diferente partidos políticos transformarse en políticas de Estado, como en este caso, ya que la idea fue incluida en el primer Plan Estratégico, rediseñada en el segundo Plan Estratégico, y podría concretarse en el marco del dialogo del Bicentenario de Junín.
Una Zona de Actividades Logísticas es una necesidad para el desarrollo económico de la ciudad, nuestra posición estratégica y la reactivación de los corredores bioceánicos nos vuelven a dar una oportunidad, por lo que si lo sabemos aprovechar puede ser también una gran oportunidad para el Junín de las próximas décadas.