Una semana después del cierre de las listas de cara a las elecciones de medio término, consultores políticos analizaron las particularidades de estos comicios en la provincia de Buenos Aires, coincidieron en cuestionar la existencia de un escenario “polarizado” y explicaron las estrategias de campaña de cada una de las fuerzas.
De acuerdo a los consultores, inseguridad y corrupción, son los ejes que buscará instalar en la agenda el oficialismo, que compite con el sello de Cambiemos. Mientras que la oposición hará énfasis en la economía, aunque la irrupción de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner en el escenario político, constituye un gran desafío para los espacios que buscan salirse de la antinomia.
1. ¿Cómo se reparten las intenciones de voto del electorado? ¿Se puede hablar de escenario polarizado?
Carlos Fara (Carlos Fara & Asociados): No hay polarización. Nosotros vemos tres actores con un piso de 25% y un techo de 33% cada uno.
Federico González (de González y Valladares): Soy muy crítico del concepto de polarización. Excepto en el ballotage en 2015, nunca hubo escenario polarizado en las últimas elecciones. Los números de las encuestas no acompañan esa idea. Cuando se habla de polarización muchas veces lo que se quiere decir es que hay dos fuerzas que claramente están peleando el primer puesto y que existe una tercera con menos chances, pero con distancias mínimas.
Analía Del Franco (Analía del Franco Consultores): Veo repartidas a las intenciones del electorado. Un 35% busca salirse de la antinomia oficialismo y kirchnerismo, y ese caudal se reparte entre los espacios que lideran (Florencio) Randazzo (Frente Justicialista Cumplir) y (Sergio) Massa junto a Margarita Stolbizer (1País). La campaña electoral va a tener mucha importancia en el sentido de atraer votantes que aún no están decididos.
Carlos Germano (Carlos Germano & Asociados): Hoy hay un escenario que si bien no es de polarización absoluta, sí sobresalen dos partidos centrales, que son Cambiemos y Unidad Ciudadana, y un tercero, 1País (Massa-Margarita Stolbizer), que está tratando de acercarse, pero que todavía está lejos del podio.
2. ¿Cómo pueden jugar las PASO en ese sentido? ¿Los votos pueden transpolarse a otras fuerzas?
Mariel Fornoni (Management & Fit): Las PASO sirven para mostrar las cartas, entonces lo que puede suceder es que en octubre se genere un voto útil o estratégico para frenar o ir en contra de alguna fuerza política.
González: No descartaría que ante el triunfo de un candidato en las elecciones generales se ejerza el voto útil. Después de las PASO puede acentuarse una lógica en la que dos fuerzas puedan pelear el primer puesto.
Del Franco: Es una realidad que si te va mal en las PASO en las generales te va pésimo porque el impacto que tiene en el electorado es decisivo.
3. Cambiemos apostó a candidatos que no tienen una instalación tan fuerte. ¿Eso puede jugarle en contra al oficialismo? ¿O le da más margen a la gobernadora María Eugenia Vidal para ponerse al frente de la campaña?
Fara: Siempre es mejor competir con un candidato conocido y prestigioso, pero el gobierno apuesta a plebiscitar la gestión, y eso solo necesita candidatos disciplinados con la estrategia.
Germano: La estrategia de Cambiemos con candidatos no tan instalados fue justamente seguir presentándose como lo nuevo frente a viejas figuras conocidas de la política. Y además se apoya en Vidal como el emblema de la lucha contra la inseguridad y las mafias. Al gobierno le juega a favor que el 50% de la sociedad, pese a las dificultades económicas, aún considera que “hay que darle tiempo”.
González: No importa el desconocimiento o la instalación. El primer error del oficialismo fue no jugar con Facundo Manes, que era una especie de encarnación de (René) Favaloro. Pero por ejemplo, Gladys González (postulante a senadora nacional) aunque es desconocida en términos mediáticos es una excelente candidata con gran carisma. En cambio Esteban Bullrich (primer candidato a senador nacional) es un gris, tiene a favor que por el sólo hecho de ser ministro de Educación es considerado una persona seria y correcta.
Fornoni: una de las cuestiones que juega a favor del gobierno es que la oposición esté distribuida en tres fuerzas distintas, por eso polarizar tiene sus riesgos. Terminan nacionalizando una elección que sería Macri-Cristina cuando la realidad es que la imagen de Vidal en la provincia de Buenos Aires es mucho mejor que la del presidente.
Del Franco: Es un desafío para Cambiemos porque avanzan con una estrategia diferente a la de los demás. Por ahora le juega en contra, pero es una realidad que Bullrich ha empezado a crecer.
4. ¿La candidatura de Randazzo puede afectar a Cristina Fernández de Kirchner?
Fara: No creo que la afecte mucho, porque los votos de Randazzo –si no presentase candidatura- irían algunos a Cristina, pero otros a Massa y el resto se dispersaría.
Germano: Sin dudas la expectativa mediática de Randazzo era más grande que la realidad. En el peronismo es muy importante la construcción territorial y en ese sentido quedó muy devaluado. Más que al caudal de votos de Cristina, es posible que afecte al de Massa. No hay que perder de vista que el piso electoral de la expresidenta es casi religioso.
González: Randazzo prolongó demasiado la expectativa. Su ausencia generó una especie de mito pero cuando apareció nos dimos cuenta que es un personaje menor de la política. De todas maneras, la estrategia de Cristina fue mala al no dejarlo jugar en las PASO, ella hubiese ganado y esa caudal de Randazzo hubiera quedado dentro de su espacio. Esos votos son los que Unidad Ciudadana necesitaba para ganar y no los va a tener.
Del Franco: Randazzo tiene penetración en sectores votantes de Scioli en el ballotage que no están en el 30% de captación de votos que tiene Cristina y que querría votar algo diferente.
5. ¿Cristina tiene un techo de votos o el cambio de estilo que mostró al lanzar Unidad Ciudadana puede ayudarla a crecer?
Fara: Es muy temprano para ver si esa estrategia funciona. Por ahora el techo se mantiene.
Fornoni: Todavía no lo medimos, pero arriesgaría que sí, tiene un techo difícil de romper.
Germano: Cristina tiene un nivel de rechazo de 65 puntos. Indudablemente tiene un techo electoral, pero la campaña tiene que empezar todavía, y los errores o los aciertos en ese sentido son muy importantes. Si logra instalar el tema económico como eje central de campaña puede ampliar ese caudal electoral.
Del Franco: Cristina tiene un estilo y una modalidad muy fuerte e instalada. No creo que el cambio de escenografía pueda darle un salto cualitativo.
González: El techo que tiene es el mismo de antes. El amperímetro de Cristina no se mueve ni para arriba ni para abajo. No importa lo que haga.
Los primeros números
Para Analogías, una consultora a la que ubican cercana al kirchnerismo, Cristina-Taiana lideran con 33,8% de los votos, seguidos por Bullrich-González con 24,1 y Massa-Stolbizer con 16,8%. Randazzo-Casamiquela sólo reúnen el 4,5% de la intención de los sufragios.
Por Dicen, la candidata por Unidad Ciudadana se ubica en 42%, el oficialismo llega a 26 y tercero está “1 País” con 14 puntos. Tanto el Frente de Izquierda como el espacio que lidera Randazzo serían elegidos por el 3% del electorado.
En tanto, la consultora M&R Asociados (dirigida por el ex funcionario sciolista Gustavo Marangoni), que elabora sus trabajos en sociedad con otra firma, Query Argentina, CFK-Vallejos y Bullrich-Ocaña mantienen un virtual “empate técnico”: 34,8% y 34,3% respectivamente. Massa-Solá se ubican en tercer lugar con 15,6% y más atrás aparecen Randazzo-Bucca con 4,6 y Pitrola-Del Caño con 3,3%.
(Por Marien Chaluf mchaluf@dib.com.ar)