La oposición confía en revertir el veto de Milei al financiamiento universitario en una sesión especial

Luego de que el presidente Javier Milei vetara la Ley de Financiamiento Universitario, la oposición se moviliza para revertir la decisión. El diputado Maximiliano Ferraro, titular de la Coalición Cívica, afirmó que tienen los votos necesarios para rechazar el veto presidencial. «Soy optimista respecto a la cantidad de legisladores que se sumarán para insistir en la aprobación de la ley», declaró Ferraro, haciendo referencia a la sesión especial que se buscará convocar para el miércoles 9 de octubre en la Cámara de Diputados.

La ley vetada establece la asignación presupuestaria para el funcionamiento de universidades, hospitales universitarios, y la recomposición salarial de docentes y no docentes. Ferraro destacó que la ley también incluye auditorías exigidas al Gobierno y una nueva fórmula de redistribución de los recursos destinados a las carreras universitarias.

Confianza en los números

El diputado recordó el apoyo logrado previamente cuando la ley fue aprobada en la Cámara: «Esperamos contar con más de los 143 votos que tuvimos en aquella madrugada», dijo Ferraro, aludiendo al respaldo inicial que la iniciativa consiguió. Además, señaló que ya han iniciado diálogos entre los bloques opositores para garantizar la presencia de todos los legisladores en la sesión.

Ferraro también llamó al Gobierno a evitar «este conflicto de poderes», aunque reconoció que el veto presidencial es una herramienta constitucional. Sin embargo, subrayó que «también lo es la insistencia del Congreso en una ley de estas características». Según Ferraro, la decisión de Milei profundiza «la asfixia y desfinanciamiento del sistema universitario, el más alto de los últimos 25 años».

Críticas al Gobierno

El legislador de la Coalición Cívica fue contundente al criticar al Ejecutivo: «El Gobierno está fuera de la realidad con lo que sucede en la educación y, en particular, en las universidades». Ferraro calificó el veto como «una provocación» y sugirió que el presidente busca un conflicto de poderes, ya que «no le gusta cuando se construyen mayorías que no siguen la línea de su gobierno».

Finalmente, Ferraro concluyó que el financiamiento universitario debería ser una prioridad en el actual contexto del país. «Estamos hablando de solo el 0,17% del PBI, destinado a universidades y recomposición salarial. Mientras tanto, hay privilegios corporativos del gasto tributario que se mantienen intactos. Pusimos sobre la mesa cómo financiar a los jubilados y las universidades, pero parece que tienen otras prioridades», sentenció.